Que las zanahorias son naranjas parece un hecho irrefutable, pero no siempre fue así. Por sorprendente que pueda parecer, esta planta apiácea ha tenido históricamente muchas variedades de colores como el amarillo, el rojo, el blanco o el púrpura.

El motivo de que las zanahorias actuales sean todas de color naranja está íntimamente ligado con la historia de España y de los Países Bajos. Tenemos que transportarnos al siglo XVI. En aquella época, nuestro país era un Imperio donde “no se ponía el sol” y que abarcaba numerosos territorios en Europa (entre ellos la actual Holanda) y los dominios en América.

Pero fue precisamente en Flandes donde la llama del independentismo prendió por primera vez en las fronteras del Imperio. Las diecisiete provincias holandesas se levantaron en armas contra Felipe II en un largo conflicto conocido como la Guerra de los Ochenta Años y que terminaría con la secesión de los territorios del norte, los actuales Países Bajos.

Aquel enfrentamiento dejó algunos importantes hitos de la historia de España, como las campañas del Gran Duque de Alba y sus Tercios Viejos, la rendición de Breda conseguida por el general Ambrosio Spínola o la batalla naval de Dunkerque.

De los Orange a las zanahorias naranjas

Pues bien, en el contexto de su lucha por la independencia, los agricultores de Flandes iniciaron una peculiar campaña de propaganda a favor de su líder, el Príncipe Guillermo de Orange y Nassau. El movimiento consistió en tomar el apellido de la casa Orange, que significa ‘naranja’ en neerlandés y aplicárselo a las zanahorias. Para ello, la gente del campo cruzó distintas variedades de la planta hasta llegar al característico color anaranjado de la dinastía Orange.

El éxito de la operación estribó en que las Provincias Unidas eran en aquella época el líder mundial en producción de zanahorias, por lo que la nueva rama se convirtió rápidamente en la mayoritaria en todo el mundo, hasta nuestros días. En concreto, las variedades más comunes actualmente, la Imperator, la Nantes, la Chantenay, la Ámsterdam, fueron todas desarrolladas en los Países Bajos a partir del siglo XIX.

Esto no quiere decir que no existieran zanahorias naranjas antes de la Guerra de los Ochenta Años, pero sí que a partir de entonces ese color se hizo predominante gracias a la acción de los horticultores holandeses.