Tener una discapacidad implica para muchas personas unas limitaciones que requieren de ayudas físicas y económicas que traten de mejorar la calidad de vida y su inclusión en la sociedad.

Precisamente, las personas mayores pueden experimentar una amplia gama de discapacidades, fruto del envejecimiento que conlleva sumar años a nuestra existencia. Discapacidades que pueden escalar en gravedad y que pueden ser temporales o permanentes.

Entre ellas se encuentra una de las más recurrentes en esta franja de población, la pérdida de audición. La exposición al ruido a lo largo de toda una vida, al propio envejecimiento del sistema auditivo o condiciones de salud como la presbiacusia, no solo hacen que escuchen peor, también que se dificulte su comunicación verbal y por tanto sus relaciones sociales. Todo ello puede tener un impacto además en la salud mental, ya que genera estrés, ansiedad, depresión o baja autoestima dada la sensación de estar desconectado del mundo que le rodea.

La pérdida de audición también puede comprometer la seguridad personal en determinados entornos como la calle, el tráfico o el hogar, al quedar mermada la capacidad para escuchar aquellos avisos auditivos de peligro.

Por eso resulta clave dar a las personas que lo necesiten un apoyo adecuado y los recursos necesarios para que puedan mantener su independencia el mayor tiempo posible, mejoren su calidad de vida y participen de manera activa en la sociedad.

3.000 euros para audífonos

Es por ello que haya entidades o comunidades autónomas que ofrezcan ayudas para hacer más llevadera esta discapacidad. Es el caso de la Región de Murcia que ofrece una ayuda económica para aquellas personas que tengan reconocido un grado de discapacidad igual o superior al 33% y que por tan precisen determinados servicios, adquisición de instrumentos o ayudas especializadas, entre ellas los audífonos, por un máximo 2 unidades y hasta un precio tope de 3.000 euros.

Y es que estos aparatos pueden llegar a tener precios prohibitivos para muchas economías especialmente de mayores que cuentan con una pensión muy limitada.

Plazos y requisitos

Para optar a esta ayuda hace falta cumplir una serie de requisitos como tener reconocida y en vigor una discapacidad en grado igual o superior al 33%, en el momento que se realice la solicitud.

Otra condición, según explica la Carm consiste en residir y figurar empadronado en alguno de los municipios de la Región de Murcia o que la necesidad para la que se solicita la ayuda "se haya producido durante el año natural en el que se ha publicado la convocatoria".

Además es necesario que el importe presupuestado de la ayuda solicitada sea igual o superior a 100 euros.

Por otro lado no se puede superar el límite de renta per cápita correspondiente para la unidad de convivencia. En el caso de unidades de convivencia formadas por una persona, es 2,5 veces el IPREM, para las formadas por dos personas, 1,75 veces este Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples y para aquellas con tres o más personas, 1,25 veces este indicador.

Tampoco "disponer de bienes inmuebles sobre los que se posea un derecho de propiedad, posesión, usufructo, o cualquier otro que implique la posibilidad de explotación o venta, cuyo valor supere el importe de seis veces la cuantía anual del IPREM vigente".

De la misma manera esta comunidad ofrece otro tipo de ayudas para mejorar la calidad de vida de personas con alguna discapacidad. Por ejemplo para eliminar las barreras arquitectónicas de una vivienda unifamiliar, como instalar rampas o grúas, el cambio de bañera por pie de ducha o la adaptación de vehículos a motor. Ayudas que en algunos casos puede llegar a superar los 5.000 euros.

Plazos

Quienes reúnan los requisitos, aún están a tiempo de presentar una solicitud hasta el 13 de mayo de este año.

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