Los inversores van a contar con numerosas referencias de peso. En Alemania se conocerá esta mañana el índice IFO de confianza empresarial. Es un indicador que los inversores siguen siempre muy de cerca. Pero el plato fuerte del día llegará un poco más tarde. Hoy, a las dos y media, se publica el PIB de Estados Unidos. Se espera un crecimiento del 2,1 por ciento en el tercer trimestre respecto al segundo. También se conocerán la balanza comercial, las peticiones de bienes duraderos, las solicitudes de subsidios por desempleo, las actas de la última reunión de la Reserva Federal y las ventas de viviendas en aquél país.

Por cierto que esta semana es muy atípica en los mercados financieros de Estados Unidos. Mañana, jueves, es jornada festiva. Es el día de Acción de Gracias. Y el viernes los mercados abrirán con horario reducido. En la práctica, Wall Street quedará en el dique seco desde el cierre de la sesión de hoy hasta el lunes.

Tras las primeras operaciones del día el índice Ibex 35 sube un 0,2 por ciento, hasta 8.830 puntos. Suben ligeramente Telefónica, Repsol, Iberdrola y banco Santander. En negativo Inditex, IAG y Siemens Gamesa.

El mercado petrolero sigue muy revuelto después de que Estados Unidos haya confirmado que sacará al mercado sus reservas estratégicas de petróleo. Ha liberado 50 millones de barriles. Falta por saber qué cantidad de petróleo liberan China, India, Reino Unido, Corea de Sur y Japón, que son los países que han aceptado la invitación de la Casa Blanca para acometer una acción concertada, un movimiento coordinado con el objetivo de abaratar el coste de la energía. Sin embargo, en las últimas horas el precio del petróleo no ha bajado. De hecho ha subido, se ha encarecido dos dólares en pocas horas, hasta 82,5 por barril de crudo Brent del Mar del Norte. Algunos analistas creen la OPEP y sus socios, sobre todo Rusia, podría interpretar este movimiento estratégico encabezado por EEUU como una declaración de guerra. A lo largo de las últimas semanas, Estados Unidos había “rogado” a la OPEP en varias ocasiones que aumentara sustancialmente su producción. Ruegos que fueron desoídos.

De ser así, no se descarta que los países productores integrados en este cártel opten por tensar la cuerda y reduzcan sus exportaciones o que las aumenten a un ritmo muy moderado. La próxima reunión virtual de la OPEP está prevista para el 2 de diciembre. De momento, por tanto, sigue muy alto el precio del petróleo. Y además, la fortaleza del dólar encarece la factura energética. Parece que continuará así durante bastante tiempo. Los analistas del Bank of America han elevado sus previsiones. Esperan ver el barril en 120 dólares el próximo año.

A comienzos de noviembre la OPEP acordó mantener el aumento de su producción en 400.000 barriles por día, como se esperaba, pero no más como le ha solicitado insistentemente, entre otros, el presidente de Estados Unidos. La Casa Blanca ha expresado su “enfado” ante la nula predisposición de la OPEP y Rusia para ayudar a la recuperación económica mundial. Parece que se va a mantener el exceso de demanda frente a un tibio crecimiento de la oferta, lo que hace pensar en precios altos de los carburantes todavía durante muchos meses. Hoy en Estados Unidos se conocerá el estado de las reservas de crudo y carburantes de la AIE. Está previsto que el 29 de noviembre Irán y las grandes potencias mundiales retomen sus negociaciones sobre la posible reactivación del acuerdo nuclear de 2015. Irán quiere que Estados Unidos retire por completo las sanciones que han impedido gran parte de las exportaciones de crudo del país.