La vicepresidenta segunda y titular de Trabajo, Yolanda Díaz había anunciado durante la toma de posesión de su cartera que su intención inmediata era convocar lo antes posible a los agentes sociales para precisamente negociar la subida del SMI. Sin embargo en esta ocasión la patronal le tomaba ayer la delantera con una propuesta clara: subir este salarioun 3% en 2024 y 2025.

Por lo pronto, la propuesta patronal CEOE pasa de subirlo un 6 % los dos próximos años, a 1.112,4 euros en 14 pagas en 2024 y a 1.145,77 en 2025. Un alza "en línea" con lo pactado con los sindicatos. La idea es mantener una correlación entre la evolución del SMI y la del resto de salarios.

Para esta propuesta de subida se habrían tenido en cuenta la inflación, la productividad nacional, el incremento de la participación del trabajo en la renta nacional y la coyuntura económica.

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Pero la mano tendida de la CEOE no está exenta de condiciones: la modificación de la "normativa de revisión de precios en los procesos de contratación del sector público" de manera que el incremento del SMI se repercuta en dichos contratos.

¿Cuánto es el SMI actual?

Este año, el salario mínimo se fijó en 1.080 euros mensuales en 14 pagas.

Para CCOO, la subida para 2024 debía ser superior a la inflación de este año, porque la de los alimentos básicos es más elevada. Las pretensiones de UGT van más allá y esperan que el salario mínimo alcance los 1.200 euros esta legislatura.

Los plazos, en el foco de la negociación

En la tertulia de Herrera en COPE, José María Fidalgo, ex secretario general de Comisiones Obreras y colaborador del programa, ha reconocido que no se esperaba la propuesta de la CEOE si bien considera que al final lo que en realidad va a estar sobre la mesa de la negociación serán "los plazos de la subida".

Cotizaciones y SMI

Para Fidalgo, las cotizaciones, "tienen que ser una parte del salario y tiene que estar por tanto en el cálculo de la empresa". Es por ello que las empresas sean precisamente, quienes más vayan a notar esta subida. No solo tienen que hacer frente al aumento del salario del trabajador, sino también a las aportaciones de la empresa a la Seguridad Social. "De alguna manera lo pagan los empresarios y los empresarios se lo devengan a los trabajadores, aunque eso no esté en la cuenta".

Se calcula que alrededor del 95% de lo que cuesta la Seguridad Social lo pagan las empresas. Por tanto, el coste para la empresa de ese trabajador no es ese salario mínimo.

A este tema también se ha referido Carlos Herrera quien ha desmontado la subida del salario mínimo: "¿Por qué no lo ponemos de 5.000€?".

El comunicador ve "bien subir el salario mínimo, desde luego para aquellos que reciben los 80 euros más al mes" aunque no ignora los efectos negativos. "Hay pymes y autónomos que van absolutamente asfixiados. Expertos han advertido que la escalada del salario mínimo puede fomentar economía sumergida o desincentivar la creación de empleo", señalaba cuando el SMI subía el 8% de los 1000 a 1080 euros.