La marcha de Cs del portavoz extremeño del partido naranja, Cayetano Polo, ha cogido por sorpresa a la dirección nacional, han asegurado a EFE fuentes de la Ejecutiva al señalar que no tenían conocimiento de ninguna discrepancia ni malestar por parte de este dirigente.

Polo ha aprovechado su intervención este jueves en la Asamblea de Extremadura para anunciar que abandona esta formación y la actividad política, y ha reconocido diferencias con la dirección nacional, entre ellas su desacuerdo con los pactos de gobierno que se han hecho en algunas comunidades y ayuntamientos después de las elecciones de mayo de 2019 y con el proceso de designación de cargos internos.

Precisamente, antes de que termine el mes de octubre la dirección de Cs tiene que renovar los comités autonómicos y designar a sus portavoces, un proceso en el que las mismas fuentes no han aclarado si Polo era uno de los que la Ejecutiva pensaba cambiar.

Cayetano Polo, que fue elegido nuevo portavoz autonómico el 13 de noviembre de 2017 y formaba parte del Consejo General de Cs, fue uno de los diez compromisarios extremeños que consiguió la candidatura de Inés Arrimadas a las primarias que se celebraron este año para elegir al sucesor de Albert Rivera al frente del partido.

Una candidatura que promovió un cambio estatutario para, entre otras cosas, dar más poder a las bases, aunque Madrid mantenía el control de la elección de los portavoces autonómicos, al contrario de lo que defendió la candidatura rival del vicepresidente de Castilla y León, que apostaba porque fuera la militancia la que escogiera a los portavoces.

Ha sido ahora cuando Polo ha manifestado sus discrepancias con este punto de los nuevos Estatutos al señalar que no quería seguir siendo portavoz del partido si no era elegido por los afiliados. EFE