La Guardia Civil ha detenido en Melilla al responsable de una correduría de seguros por presunta estafa a "multitud de propietarios de vehículos" --hasta el momento hay confirmados 35-- a los que contrataba seguros de automóviles con identidades de personas fallecidas y otros datos falsos, lo que provocaba que circularan sin seguro a pesar de haberlos abonado.

Según ha informado este viernes un portavoz de la Comandancia, el arrestado es un varón adulto con residencia en la ciudad, que regentaba un conocido local en Melilla "con labor de correduría de seguros" que ha sido acusado de la presunta comisión de delitos continuados de falsificación, estafa, revelación de secretos y usurpación de identidad.

La citada fuente ha indicado que presunto autor daba de alta a multitud de seguros de automóviles introduciendo como tomador del seguro a un tercero que no correspondía con el titular del vehículo ni tenía relación alguna con éste.

Al respecto, ha detallado que "los datos de contacto eran todos ficticios o falsos, y los recibos nunca eran pagados, por lo que la aseguradora los anulaba por impago y sospecha de fraude, dejando tanto al vehículo como al propietario sin cobertura aseguradora".

El portavoz ha explicado que el detenido configuraba las altas a través de aplicación telemática, aportando datos conocidos de antiguos clientes. "Los contratantes desconocían estas irregularidades en las altas de seguro, ignorando incluso que estuvieran circulando sin seguro en vigor, ya que les eran facilitados documentos falsos que supuestamente amparaban al vehículo", han precisado.

Por el momento, ascienden a 35 las personas afectadas por tales hechos delictivos, de las que muchas de ellas han interpuesto denuncia.

'OPERACIÓN LOKI'

El portavoz de la Comandancia ha destacado que las fases de instrucción policial, investigación y explotación de esta intervención, que han denominado 'Operación LOKI', han sido llevadas a cabo por la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de Melilla, tras efectuar el análisis de todos los datos y recabar todas las pruebas documentales, logrando así "la plena identificación del autor".

La entrada y registro se ha efectuado en un conocido local de la ciudad, con labor de correduría de seguros, donde se han intervenido diferentes dispositivos móviles, ordenadores y diversa documentación.

La Guardia Civil ha estimado que la cantidad defraudada a la aseguradora asciende a 14.000 euros.

El arrestado ha pasado a disposición judicial como presunto autor de delitos continuados de falsificación, estafa, revelación de secretos y usurpación de identidad. Las diligencias policiales, el detenido y los efectos intervenidos han sido remitidos al Juzgado de Instrucción número 3 de Melilla.