Los socios de Gobierno de Pedro Sánchez siguen sin ver cumplidos algunos de los puntos que el líder socialista se comprometió a cumplir antes de la investidura. El sostenimiento del líder socialista en el Palacio de la Moncloa tiene muchas aristas que dependen de forma directa de varias formaciones políticas, con las que el Ejecutivo se comprometió a cumplir una serie de medidas o decisiones que a día de hoy todavía no se han ejecutado.

En los últimos días hemos conocido que el Gobierno Central, a través del Ministerio de Asuntos Económicos, ha publicado una lista de provincias que deberían verse beneficiadas del Plan de Extensión de la Banda Ancha, un proyecto que busca dotar de conexión a Internet a muchos municipios de la conocida como España Vaciada.

Llama la atención que una de las provincias que se ha quedado fuera de este plan, junto a otras once, ha sido Teruel. Este hecho es destacable debido a que el diputado de Teruel Existe, Tomás Guitarte, fue importante para llevar a buen término la investidura de Pedro Sánchez, con el que se llegó a un acuerdo en el que uno de sus puntos fundamentales era la implantación de la banda ancha en muchas zonas despobladas de Teruel. Con el plan presentado, el Gobierno ha incumplido su palabra con el partido aragonés.

"La implantación de la banda ancha es uno de los pilares estratégicos para el desarrollo de cualquier provincia en igualdad de condiciones. Según los mapas de cobertura publicados de 2016, Teruel es una de las provincias españolas con peor cobertura (con mayores zonas blancas). Se trata de una actuación que vertebra y cohesiona el Estado. Esta situación debiera mejorar como consecuencia de los proyectos ya aprobados en las últimas convocatorias, y se deberá seguir trabajando para mejorar las coberturas en la provincia de Teruel", plasmaba uno de los párrafos de dicho acuerdo.

Esta no es la primera vez que la provincia turolense recibe un desplante del Gobierno de España. La pasada primavera el Ministerio para la Transición Ecológica aprobaba una partida de 20 millones de euros para paliar los efectos de la tormenta Gloria en los territorios del este peninsular. Este fenómeno meteorológico había dejado en la provincia de Teruel destrozos millonarios, municipiosincomunicados durante días y decenas de personas que tenían que abandonar sus domicilios ante la nieve. De esos 20 millones de euros, la cantidad que recibió Teruel fue cero.

Los principales acuerdos no efectivos de Sánchez con sus socios de coalición

El Gobierno de España pasa por un momento clave para la 'supervivencia' de la coalición, ya que está en plenas negociaciones para sacar adelante los próximos Presupuestos Generales del Estado, fundamentales para afrontar la crisis social y económica derivada de la pandemia. En este sentido, el Gobierno deberá medir perfectamente la intensidad de sus compromisos con otras fuerzas política, ya que tiene diversos asuntos pendientes con fuerzas políticas como EH Bildu o ERC, fundamentales para el sostenimiento del Gobierno de coalición.

Por un lado, el Gobierno de Sánchez todavía tiene que llevar a términos efectivos la derogación de la reforma laboral del Gobierno de Mariano Rajoy, un acuerdo al que llegó con Unidas Podemos y EH Bildu y que sirvió entre otras cosas para sacar adelante una nueva prórroga del estado de alarma. El documento provocó mucho revuelo en la Cámara Baja, ya que se anunció de forma inesperada y un momento crucial para el futuro económico y laboral de nuestro país. Incluso esta decisión provocó ciertas discrepancias entre los miembros del Consejo de Ministros, que vieron en esta derogación un paso innecesario que podía afectar a la estabilidad económica del país. Aunque el partido nacionalista y Unidas Podemos querían una derogación rápida y tajante, el sector socialista del Gobierno lo quiere hacer de forma progresiva y estudiará una derogación progresiva a lo largo de este curso político.

Por otro lado está el compromiso con ERC y el independentismo catalán. En este punto, la negociación de los próximos Presupuestos Generales del Estado juega un papel fundamental y es por eso que la reanudación de la mesa de negociación entre el Gobierno de España y la Generalitat de Cataluña es una tarea pendiente por parte del Ejecutivo de coalición. Hasta el momento, solo ha sido en una ocasión cuando se han podido reunir ambas administraciones debido a la crisis provocada por la pandemia. Pero el compromiso de Sánchez por retomar este diálogo todavía no se ha cumplido y puede ser clave para el futuro del Gobierno de coalición.

Incluso dentro del Consejo de Ministros, Pedro Sánchez ha protagonizado algún que otro desplante a su socio preferente en la coalición. Unidas Podemos ha mostrado en más de una ocasión su enfado por algunos de los pasos que ha dado la bancada socialista del Gobierno. Uno de los más recientes fue el silencio que desde la cartera de Economía se mantuvo sobre la fusión entre Bankia y CaixaBank. Estas negociaciones eran conocidas por Nadia Calviño mucho antes de que se hiciera público el acercamiento, algo que no sentó nada bien al vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias. En aquellas fechas, el conocimiento por parte de Pedro Sánchez de salida del Rey Emérito de España a espaldas del líder de Unidas Podemos también provocó ciertas tiranteces entre ambos políticos.

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Otro de los puntos que ha provocado ciertas discrepancias entre el Gobierno y sus socios de coalición ha sido los contactos que Sánchez ha mantenido con Ciudadanos para la negociación de los próximos Presupuestos Generales del Estado, algo que no ha sentado nada bien ni a Unidas Podemos ni a ERC, aunque de una manera u otra han accedido a los contactos entre el líder socialista e Inés Arrimadas.