Cinco meses después de su investidura como nuevo inquilino de la famosa Casa Blanca, Joe Biden se reunirá hoy con su homólogo español, Pedro Sánchez, en un encuentro que ha tardado en ocurrir más de lo que se podría imaginar.

Ambos coincidirán en la cumbre de la OTAN en Bruselas, reunión que aprovecharán para conocerse brevemente y conversar durante unos pocos minutos, según lo que ha informado Moncloa, con el fin de que se produzca un primer acercamiento después de que Biden se haya reunido ya con otros 22 líderes políticos antes que con el español.

En los cinco meses que lleva Joe Biden en el cargo ni tan siquiera se han telefoneado, a pesar de que durante este periodo sí ha hablado con otros presidentes internacionales, bien por llamada, videollamada o en una reunión presencial.

Sin embargo, hay que tener en cuenta que la situación epidemiológica ha impedido que las relaciones diplomáticas siguieran su curso habitual, lo que ha realentizado los procesos más de lo normal. Buena prueba de ello es el hecho de que en este momento, el presidente norteamericano se encuentra inmerso en el que es su primer viaje internacional desde que se alzó con la victoria contra Donald Trump en diciembre de 2020.

Esta primera gira fuera de los Estados Unidos de América dio comienzo el pasado 10 de junio en el Reino Unido, cuando Joe Biden se reunió con el primer ministro de las islas, Boris Johnson, y conoció a la reina de Inglaterra, Isabel II, para posteriormente participar en el encuentro del G7 en el condado británico de Cornualles, que a su vez se tradujo en la primera reunión global de importancia tras el estallido de la crisis del coronavirus.

Allí se reunió también con los líderes políticos de Alemania, Japón, Francia, Italia y Canadá. Después de esta primera toma de contacto, el presidente americano viajó dirección Bruselas, donde asistirá a la cumbre de la OTAN como paso previo a su encuentro en Suiza con el máximo mandatario de Rusia, Vladimir Putin, previsto para el próximo día 16 de junio.

Como se ha comentado anteriormente, será precisamente en Bruselas donde se reunirá por primera vez con Pedro Sánchez, con el que no ha entablado conversación privada a pesar de haber coincidido con él en dos cumbres virtuales, condición que posiblemente haya influenciado a la hora de establecer contacto directo.

La primera de ellas respondió al Consejo Europeo, en el que se reunieron los líderes de los países de la Unión Europea con Joe Biden el pasado 25 de marzo, mientras que la segunda estuvo motivada por la Cumbre sobre el Clima, en la que participaron 40 mandatarios internacionales durante los días 22 y 23 de abril.

Tras cinco meses de espera, al fin llegará el momento en el que Pedro Sánchez y Joe Biden entablen su primera conversación formal, convirtiendo al líder del Ejecutivo español en el vigésimo tercer líder con el que se reúne el nuevo inquilino de la Casa Blanca.

Antes de la reanudación de las reuniones presenciales, Biden ya se había citado de forma telemática con los líderes de sus naciones vecinas, Justin Trudeau (Canadá) y Andrés Manuel López Obrador (México).

Después, se dio cita virtualmente con el primer ministro de Irlanda, Micheál Martin, el de Japón, Yoshihide Suga, el presidente de la República de Corea, Moon Jae-in y el príncipe heredero de los Emiratos Árabes Unidos, Mohamed bin Zayed.

A través de llamada telefónica, Biden también ha mantenido contacto con varios líderes europeos como Macron, Merkel o Johnson, con los que ha hablado en más de una ocasión, al igual que con el japonés Yoshihide Suga o con el ruso Vladimir Putin, con el que se reunirá presencialmente en unos días, tal y como se cita anteriormente.

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Del mismo modo y por diferentes motivos derivados de la actualidad, Biden ha estado en contacto con el primer ministro de la India, con el presidente de Israel y con el presidente de la Autoridad Palestina, así como con líderes políticos de Irak, Arabia Saudí, Jordania, Afganistán y Egipto.

A pesar de esta evidente insistencia en los países de Oriente Medio, Biden también ha dialogado con sus homólogos europeos de Grecia y Ucrania, o con los mandatarios de otras zonas del mundo como Guatemala o Kenia.

Mientras tanto, la segunda al mando, Kamala Harris, ha extendido las relaciones del nuevo Gobierno de la Casa Blanca con llamadas a los líderes de Dinamarca, Túñez, la República Democrática del Congo, Noruega o Australia.