El gobierno de concentración ha prometido su cargo en el Palacio de la Zarzuela. Salen nueve ministros y se estrenan otros tantos. Todo ello organizado sobre una tejida red de meritocracia socialista, pensando en una legislatura de alto voltaje que estará marcada por la amnistía, según desgrana, el jefe de Política de COPE, Ricardo Rodríguez.

Los 22 ministros del gobierno de coalición de PSOE y Sumar han prometido sus cargos ante Felipe VI en el Palacio de la Zarzuela con el compromiso de respetar la Constitución y mantener “la lealtad al rey”.

Ante un ejemplar de la Constitución y sin símbolos religiosos, los ministros, de ellos, nueve que se estrenan, han ido desfilando uno a uno por el Salón de Audiencias para leer la fórmula de la promesa ante el monarca y con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y los otros poderes del Estado como testigos.

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El primero en acatar la carta magna ha sido Félix Bolaños al pasar a ser el nuevo titular de Justicia, además de Presidencia y Relaciones con las Cortes, por lo que le ha correspondido ejercer como notario mayor del Reino en la promesa de los demás ministros.

A continuación, han cumplido el trámite las cuatro vicepresidentas, seguidas de los titulares de los llamados ministerios de Estado y del resto en orden de antigüedad de cada departamento, por lo que Sira Riego, de Juventud e Infancia, ha sido la última.

Como ya ocurriera hace cuatro años, todos los miembros del Gobierno han prescindido de la Biblia y el crucifijo, y buena parte de ellos han rematado la fórmula de la promesa remarcando "el Consejo de Ministros y Ministras", también en femenino.

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Tomas de carteras: Momento tenso con Irene Montero

Muchas sonrisas, buen tono y palabras de agradecimiento tanto de los ministros salientes como de los entrantes. Sin embargo, ha habido un traspaso de carteras bastante tenso. El de la de Igualdad que entrega Irene Montero, de Podemos, a la socialista Ana Redondo.

Montero ha criticado que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, las "echa" del Ejecutivo (a ella y a Ione Belarra) por "poner las instituciones al servicio del avance de los derechos feministas" y ha recomendado a su sucesora al frente del Ministerio de Igualdad, Ana Redondo, "valentía para incomodar a los amigos de 40 y 50 años" de Pedro Sánchez.

"Querida ministra Belarra, hoy Pedro Sánchez nos echa de este Gobierno y es precisamente por haber hecho lo que dijimos que haríamos: poner las instituciones al servicio del avance de los derechos feministas", ha manifestado Montero durante su discurso tras el traspaso de cartera, que ha tenido lugar en la sede del Ministerio de Igualdad.

Dirigiéndose a la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, Montero ha lamentado que Pedro Sánchez las "echa de este Gobierno" y "rompe con ello la unidad de un bloque democrático" en el que, a su juicio, se necesitan "todas, todos y todes, las unas a las otras, más que nunca".

Asimismo, Montero ha ofrecido algunos consejos a la nueva ministra de Igualdad, Ana Redondo, entre ellos, que se rodee del "mejor equipo", que nunca la "dejen sola", unas palabras que ha pronunciado emocionada; y que sea valiente para "incomodar" a los "amigos de 40 y 50 años" de Sánchez.

"Ministra, te desearía suerte pero creo que no es lo más importante que necesita una ministra de Igualdad. Te deseo que te rodees del mejor equipo, que nunca te dejen sola y que tengas valentía para incomodar a los hombres amigos de 40 y 50 años del presidente del Gobierno", ha manifestado Montero, entre los vítores del público asistente al acto.

Yolanda Díaz toma de posesión

La vicepresidenta segunda y titular de Trabajo, Yolanda Díaz ha prometido al tomar su cartera que el nuevo Ejecutivo "va a ir más lejos" para modernizar el país y serán un referente en Europa para seguir democratizando el país y cumplir el mandato de la "mayoría del sí" que surgió de las elecciones del 23J, que requiere también de la movilización social y ciudadana para consolidarse.

La vicepresidenta segunda ha tomado posesión del cargo visiblemente emocionada, ante la mirada de su hija, Carmela, y de su padre, Suso, quien le enseñó "a ser buena persona y defender con una serenidad pasmosa a quien representas". "La generación de mi padre y mi hija tienen siempre que darse la mano, dialogando", ha deseado Díaz.

Alto voltaje con el PP

Pedro Sánchez refuerza a su núcleo duro en un Gobierno continuista para lidiar con una legislatura de máxima confrontación con el PP. Y sin perspectiva de freno y marcha atrás. El ascenso de María Jesús Montero como vicepresidenta cuarta y de Félix Bolaños al sumar Presidencia a relaciones con las Cortes y Justicia "ejercerá de enlace entre los tres poderes", sostienen benevolentes desde el PSOE. El biministro, muñidor de la letra de la amnistía, afronta una judicatura en pie de guerra ante las pruebas de estrés por delante.

Asume una función cardinal Pilar Alegría, que salta de la portavocía de Ferraz a La Moncloa. A ellos se une Óscar Puente al frente de Transportes, "una cartera territorial para un perfil combativo", según razona el entorno presidencial. La continuidad queda apuntalada con los llamados "Ministros de Estado", en el intento de transmitir estabilidad. El camino arranca ahora. Los nuevos titulares toman posesión este martes y el miércoles se reúne el primer Consejo de Ministros.

Un Gobierno continuista

Saben en La Moncloa que desde el primer día va a haber chaparrón. La ley de amnistía trae una borrasca que afectará al mapa político toda la legislatura. Ambiente con temperaturas altas y, a la vez, tormenta política. La tapada, la gran sorpresa, fue Ana Redondo, profesora de Derecho Constitucional y concejal socialista en el Ayuntamiento de Valladolid, que es la nueva ministra de Igualdad, que ahora pilota el PSOE. El presidente del Ejecutivo ha confeccionado un equipo pensando en una legislatura tensa, de confrontación con el PP.

Pero al Gobierno le queda aún algún remate. La salida de Nadia Calviño para presidir el Banco Europeo de Inversiones en las próximas semanas o meses y la posibilidad de aupar a Teresa Ribera como comisaria europea. Con la marcha de la vicepresidenta económica a Luxemburgo, que en La Moncloa dan por segura, la ministra de Transición Ecológica, un pilar fundamental en la actualización del discurso socialista en la etapa de Sánchez, se convierte en la candidata más firme de España para ocupar un puesto en la Comisión. El baile no ha acabado.