Este viernes, el Ministerio de Interior ha acatado la sentencia del Tribunal Supremo (TS) y ha comunicado la restitución del coronel Diego Pérez de los Cobos, que fue cesado por pérdida de confianza como jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid por parte del ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska.

El pasado mes de marzo, el Supremo dio dos meses de plazo para que Pérez de los Cobos fuera repuesto al frente de la Comandancia de Madrid, un plazo que comenzaría a correr en el momento en el que Interior diera por recibida la notificación de la sentencia.

Finalmente, casi cuatro meses después, el departamento de Grande-Marlaska ha comunicado la restitución al juzgado sentenciador en la Audiencia Nacional y al propio interesado. La orden será efectiva una vez que se publique el próximo martes en el Boletín Oficial de la Guardia Civil.

Marlaska lleva semanas 'preparando el terreno'

El ministro del Interior ha tardado en dar el paso definitivo, aunque ha ido preparando el terreno. Así, hace 20 días ascendió a general al hasta ahora coronel David Blanes, que ocupaba el despacho de Pérez de los Cobos desde el cese de este hace tres años. Dicha decisión permite que la plaza de Pérez de los Cobos al frente de la Comandancia madrileña esté vacante, aunque la dirige de manera provisional el jefe de operaciones hasta que se incorpore su titular cesado en 2020.

La restitución llega tres años y medio después

Pérez de los Cobos fue cesado en mayo de 2020, concretamente un domingo por la noche, a los pocos días de declararse el estado de alarma por la COVID-19 y de que agentes de la Comandancia de Madrid iniciaran una investigación --luego archivada-- por orden de una juez sobre la posible conexión de la manifestación feminista del 8-M y la expansión de contagios.

El cese de este coronel ha motivado una de las críticas recurrentes del PP, Vox y Cs a la gestión de Grande-Marlaska. El coronel alegó en uno de sus recursos que su cese era una "directa consecuencia de no haber accedido a realizar un acto abiertamente ilegal", como hubiera ocurrido en el caso de "informar a los responsables políticos del Ministerio de Interior de una investigación sometida a la más estricta reserva".