El presidente del PPC, Alejandro Fernández, y otros dirigentes del partido han sido recibidos este sábado en el centro de Vic (Barcelona) con insultos, abucheos y gritos de "fascistas" por un grupo de manifestantes, en una tensa protesta que ha obligado a los Mossos a abrir paso a los políticos.

Los dirigentes populares habían convocado este mediodía una rueda de prensa en la plaza Mayor de Vic, donde el partido pidió permisos para montar una carpa informativa que el Ayuntamiento de la población les ha denegado.

Cuando el grupo de políticos caminaba por el centro de Vic, decenas de personas se han concentrado para impedirles el paso, mientras les increpaban a gritos de "fascistas" o "fuera, fuera" y proferían insultos.

En la protesta se han vivido momentos de tensión, con empujones y algún zarandeo, cuando algunos manifestantes se han encarado a los Mossos d'Esquadra que trataban de impedir que se acercaran a los dirigentes populares.

Ello ha obligado a un grupo de agentes de la policía catalana -entre ellos de unidades de orden público- a intervenir para garantizar el paso de la comitiva popular y que pudieran celebrar la rueda de prensa.

En un mensaje a través de su cuenta de Twitter, Fernández ha ironizado sobre el "pacífico recibimiento" que los dirigentes del partido han tenido hoy en Vic. "No todo el mundo, por supuesto: también hemos podido charlar con muchos vecinos encantadores", ha añadido Alejandro Fernández.

En su mensaje, el líder popular ha tenido palabras de agradecimiento a los Mossos d'Esquadra "por su trabajo" y también ha puesto en valor el "coraje" de sus compañeros de partido.

El PPC anunció ayer que presentará una denuncia ante la Fiscalía contra el Ayuntamiento de Vic (Barcelona) por prevaricación administrativa tras la decisión del consistorio de denegar la instalación de una carpa de los populares en la plaza Mayor de la localidad.

Según el PP, el pasado lunes el Ayuntamiento de Vic notificó a los populares la negativa a la instalación de una carpa amparándose en una normativa municipal que impide el desarrollo de "actividades contrarias a la moral, a las buenas costumbres ciudadanas, o al orden público" en la vía pública.