Marcio Pérez Santana, un hombre de 41 años hijo de una pareja de emigrantes de Ponte Caldelas (Pontevedra) ya retornados a Galicia, falleció el pasado miércoles en la localidad brasileña de Salvador de Bahía, como consecuencia de unos disparos efectuados por una patrulla de la Policía Militar.

Según ha explicado en declaraciones a Efe el alcalde de Ponte Caldelas, Andrés Díaz, el suceso se produjo cuando Marcio, que tenía una empresa consultora en Brasil, y su pareja estaban a punto de entrar en el garaje de su residencia. La información recibida por la familia, ha añadido el regidor, indica que la pareja pasó con su coche por un control policial que no estaba correctamente señalizado y la víctima se lo saltó al creer que se trataba de asaltantes armados.

La Policía abrió fuego contra la pareja y una bala alcanzó a la víctima en la nuca, provocándole la muerte al instante. Las autoridades brasileñas, según recogen medios locales, aseguran que la patrulla policial habría confundido el coche de la pareja con el de un grupo de ladrones al que buscaban.

La madre de la víctima ha partido en las últimas horas hacia Brasil para hacerse cargo del cuerpo del fallecido, que deja dos hijas de corta edad, y poder repatriarlo a España. Marcio Pérez Santana, que regresaba todos los veranos a Ponte Caldelas, había optado por quedarse en Brasil después de que sus padres, ya jubilados, decidiesen regresar a Galicia