En Bélgica la gente todavía puede salir a la calle. A diferencia de otros países como Italia o España, la población y las autoridades públicas no son conscientes de la dimensión del problema de salud pública que está generando el coronavirus.

Llegan días difíciles y las cadenas de supermercados se preparan para recibir avalanchas de gente. Algunas tiendas han limitado el horario de 8 a 9 de la mañana solo para personas mayores de 65 años. Además, la federación de tiendas y servicios ha decidido que a partir de ahora entre los clientes debe haber una distancia de 10 metros cuadrados.

Algunos supermercados también están limitando la compra de papel higiénico. Solo un paquete por familia.

Hace unos días la Primera Ministra de Bélgica Sophie Wilmès aseguró que el abastecimiento estaba garantizado en el país, no obstante, estas medidas que se están tomando ponen de relieve que se pueden generar problemas en las tiendas con productos de primera necesidad.

En estos momentos, en Bélgica hay 1.243 casos de coronavirus y 10 personas han perdido la vida. Es importante recordar que están cerrados los restaurantes, bares y los colegios. Las tiendas y los puestos de comida para llevar continúan abiertos.

MASCARILLAS EN LAS CÁRCELES

De todas formas, de las crisis siempre salen iniciativas positivas. Los presos del país están fabricando mascarillas protectoras para los hospitales de Bélgica. Una forma de ser útiles en estos tiempos complicados y son varias las prisiones que están llevando a cabo esta iniciativa.

La preocupación va en aumento y ésta es una forma de ayudar a la sociedad en estos tiempos tan complicados.