Turquía y Armenia han acordado este viernes reabrir "lo más temprano posible" su frontera para permitir el libre paso de ciudadanos de otros países, como previo paso a la "normalización total" de sus siempre volátiles y complicadas relaciones.

El paso fronterizo había permanecido cerrado desde 1993 por iniciativa de Turquía tras la primera guerra de Nagorno Karabaj. Las relaciones entre ambos han sido siempre motivo de conflicto ya fuera por el apoyo de Turquía a Azerbaiyán en este conflicto, como por su negativa a reconocer el genocidio armenio cometido por el antiguo Imperio Otomano entre 1915 y 1923.

El Ministerio de Asuntos Exteriores de Turquía ha emitido una nota este viernes informando de que tras la cuarta reunión entre ambas delegaciones en Viena, la capital de Austria, han acordado permitir el cruce de la frontera terrestre que comparten para los ciudadanos de terceros países.

En la nota, se especifica que el enviado especial turco, el diplomático Serdar Kilic, y el vicepresidente del Parlamento de Armenia, Ruben Rubinyan, han acordado iniciar "lo antes posible" el comercio de carga aérea directa entre los dos países, así como "otros posibles pasos concretos" para lograr normalizar relaciones.

Ambos "han enfatizado" el acuerdo de seguir con este proceso "sin condiciones previas", después de que los dos países restablecieran sus vínculos diplomáticos en diciembre de 2021 tras una ruptura de tres décadas.