Con motivo del Encuentro Mundial de las Familias que ha comenzado a celebrarse hoy en Roma y en cada diócesis del mundo, los obispos de la Subcomisión de Familia y Vida han hecho público un mensaje en el que recuerdan que nadie puede pensar que debilitar a la familia fundada en el matrimonio sea bueno para la sociedad. El matrimonio no es una moda, ni un dato accesorio en el currículum. Citando unas palabras del Papa Francisco, los obispos señalan que el matrimonio entre un hombre y una mujer forma parte de la naturaleza de la persona y de su carácter social.

La Iglesia apuesta por el Evangelio de la familia en una sociedad en la que se abre paso la cultura de la muerte con sus diversas formas de descarte. Los obispos españoles animan “a apoyar a quenes tiene derecho a nacer y a ser acogidos por sus padres con amor” y solicitan el apoyo social y estatal necesario para evitar que las mujeres se convertiertan en víctimas del aborto. A las puertas de la gran manifestación a favor de la vida del próximo domingo en Madrid, los obispos alientan “a todos los católicos a promover la defensa de la vida, denunciando los proyectos legislativos que atentan contra ella y confunden la injusticia con el derecho”. A través de los cauces que permite la sociedad democrática, es hora de movilizarse en favor de la vida, y también de “buscar con creatividad nuevos modos de instaurar la necesaria cultura del cuidado que la promueva y proteja”.