Con mucha frecuencia nos lamentamos de la ausencia de pactos entre las diversas formaciones políticas para afrontar con fuerza y garantías una crisis única en la historia reciente. En el Ayuntamiento de Madrid, el alcalde José Luis Martínez-Almeida ha conseguido los denominados Acuerdos de la Villa, un pacto para la reconstrucción de la capital de España firmado por todos los partidos con representación en el consistorio.

El acuerdo alcanzado en el ayuntamiento de la capital de España ha ido más allá de las legítimas diferencias ideológicas y se ha centrado en las necesidades reales provocadas por la crisis de la pandemia, pero abre también un camino para el futuro. Fruto del trabajo de cuatro comisiones sectoriales, aborda aspectos que van desde la oferta de mascarillas en los servicios públicos a la tarjeta social destinada a las familias vulnerables, o la paralización de los desahucios en las viviendas municipales hasta fin de año. También incide en la ordenación urbana con la creación de bulevares, la modificación de espacios públicos para dar mayor accesibilidad, y en el apoyo a la cultura y a los espectáculos.

El alcalde de Madrid, que declara la inspiración humanista cristiana de su forma de hacer política, ha demostrado con los Acuerdos de la Villa que la política también es un camino de diálogo y encuentro, siempre que el bien común sea el norte que guíe a sus protagonistas.