Los hábitos alimenticios son cada vez más insostenibles para la salud humana y para el medioambiente. Es la alerta que lanza en su nuevo informe el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático de la ONU. En un estudio monográfico sobre el uso de la tierra y su impacto en la crisis climática, se advierte de que la cuarta parte de gases de efecto invernadero proceden de la agricultura y la sobrexplotación de los bosques, cifra que aumenta hasta el 40 % si se añade la producción agrícola. El foco se pone en el consumo excesivo de carne, que puede generar 100 veces más emisiones que la verdura, o en productos como el aceite de palma, ingrediente habitual de los alimentos procesados y uno de los grandes responsables de la deforestación en los trópicos.

Los mensajes no son los mismos para todos los países. Mientras en muchos lugares la ingesta de proteína animal es insuficiente, en otros su consumo excesivo provoca serios problemas de sobrepeso. A esto se añade que alrededor de 30% de alimentos termina en la basura, efecto de la mercantilización extrema de la agricultura y la ganadería. El mensaje no es muy distinto al que viene lanzando insistentemente el Papa Francisco, secundado por organizaciones como Manos Unidas. El actual modelo capitalista de producción y consumo es insostenible desde el punto de vista social y ambiental. El grupo de expertos de la ONU ha vuelto a confirmarlo.