Concluye hoy en La Habana la IV Conferencia Internacional “Por el equilibrio en el mundo”, que este año ha rendido homenaje al pensamiento de José Martí, el llamado “apóstol” de la independencia de Cuba. En esta asamblea, a la que asisten políticos y pensadores de orientación de izquierda, se han abordado temas de calado como la juventud, la era de las noticias falsas, la ecología, los derechos humanos y la importancia de la ética en el desarrollo de la sociedad. La magnitud de los debates ha impulsado al Papa a enviar un mensaje para desear que den frutos de entendimiento y de diálogo “en la consecución de una civilización más fraterna”. Además ha subrayado que quienes se empeñan en la defensa de la dignidad de las personas pueden encontrar en la fe cristiana los argumentos más profundos para ese compromiso.

Sin embargo, curiosamente los organizadores se han ocupado en exaltar la vigencia del pensamiento marxista, aunque algunos participantes, como el brasileño Frei Betto, han reconocido la necesidad de que la izquierda haga autocrítica y se dedique a pensar qué errores ha cometido, además de la corrupción, para que la derecha haya vuelto con tanta fuerza a los países iberoamericanos. Decía José Martí que “Pensar es servir”. Y lo que más falta hoy en la izquierda, como en el conjunto del espectro ideológico, es precisamente pensamiento crítico.