Por segunda vez en menos de un año, la Comisión Europea ha vuelto a instar a España a renovar el Consejo General del Poder Judicial fortaleciendo la independencia de este órgano y evitando su politización. En este segundo informe sobre la situación del Estado de Derecho en los diversos países de la Unión Europea, Bruselas vuelve a manifestar su preocupación sobre España por la sensación que tiene de politización de la Justicia, los vínculos entre la Fiscalía general y el Gobierno, y la falta de medios y de magistrados. Desde su anterior informe, emitido el pasado mes de septiembre, Bruselas tan solo reconoce un avance: la decisión del Gobierno de retirar la reforma de la ley que regula la elección de los miembros del Poder Judicial, que Sánchez pretendía adecuar a sus intereses políticos.

Estos y otros problemas, como el reciente varapalo al Gobierno por parte del Tribunal Constitucional a propósito del estado de alarma, son algo que los españoles percibimos día a día, pero que en Bruselas preocupa en la medida en que supone la erosión de un pilar básico del Estado de Derecho como es la independencia del Poder Judicial. El Gobierno reacciona a los reveses judiciales con menosprecio y críticas a los jueces, lo que sin duda deja atónitos a los responsables europeos.