Entre claveles, algodón de azúcar y atracciones de feria, también pasean perros y caballos. Aunque más que pasear, lo que hacen es patrullar porque forman parte del dispositivo que ha montado la policía municipal en la pradera de San Isidro. Más de 1.700 agentes, tanto de paisano como de uniforme, estarán trabajando en las inmediaciones del Parque de San Isidro. Pretenden evitar, principalmente, dos cosas: reyertas y hurtos. “En estas Fiestas es muy típico el robo de carteras y móviles, la gente tiene que estar pendiente de que no se les acerque nadie y tampoco deben ir solos a ningún sitio de noche”, ha aconsejado Carlos Lozano, portavoz de la policía municipal de Madrid.

La policía vigilará tanto los permisos de los puestos como de las atracciones. También, evitará el acceso al recinto con botellas de vidrio y con armas. Este año este dispositivo cuenta con algunas novedades, como la introducción de patrullas caninas y de caballería y el reparto de más de 200.000 pulseras identificativas a niños, mayores y personas con discapacidad. También, habrá un espacio de Madrid Salud y un Punto Violeta para informar sobre agresiones machistas.

Desde este viernes hasta el 18 de mayo hay cortes de tráfico en la Avenida de la Emperatriz Isabel, en el Paseo de la Ermita del Santo y en el Paseo Quince de Mayo, en estas dos últimas calles ya está prohibido aparcar. La policía recomienda que se venga en transporte público a estas fiestas, en las que se prevé que se supere el millón de personas.