Ahora más que nunca están de moda los universos paralelos. Batman es Michael Keaton, el Grand Prix no tiene vaquilla e, imagínate, que España fuera toda la península ibérica. Que hubiésemos conquistado Portugal. Pues fue uno de los grandes planes de Franco, tanto que incluso tenía un documento con el plan trazado para llegar hasta Lisboa.

Una carpeta de 99 páginas: el conocido como 'Objetivo: acción sobre Portugal'. Manuel Ros Agudo, historiador, fue el que pudo verlos por primera vez y... Tela. El documento es muy detallado, tanto con nuestra capacidad militar como la del vecino, armamento, estrategias, ruta de incursión. El que quiera puede verlo, documento número 2809 de los archivos de la Fundación Francisco Franco.

Pongamos contexto: Segunda Guerra Mundial. El bando nacional acababa de ganar la Guerra Civil y se sentaban las bases del franquismo. En Portugal gobernaba Antonio de Oliveira Salazar, y que duraría hasta 1968. El conocido como Estado Novo, un régimen totalitario que contaba con el apoyo de Reino Unido.

De hecho, la reacción entre los británicos y los portugueses es algo que venía de mucho tiempo atrás. El motivo es simple y evidente: es un país pequeño y necesitaba un seguro de protección. Siempre han tenido la mosca detrás de la oreja con que les pudiésemos invadir y a Reino Unido le interesaba mucho un amigo en esa ruta marítima.

El impulso de la Segunda Guerra Mundial

Pero nada dura para siempre. Llega la Segunda Guerra Mundial y el tablero geopolítico se desdibuja. Por si acaso, Portugal apoya a Franco durante la Guerra Civil, lo que le da la llave para comprarle armas a Alemania y a Italia. Había que reforzarse. Nunca se sabe.

Y eso, teniendo en cuenta el contexto internacional, no le hizo ninguna gracia a los británicos, que le dieron un ultimátum a los portugueses: o nos compras las armas a nosotros o, cuando vengan los españoles a por ti, que te defienda otro.

Las sospechas de Franco eran que, con todo el contexto de la Guerra, lo que se venía era una invasión inminente de los ingleses a la costa oeste de la Península. Así trazó un plan esas 99 páginas, en la que entraríamos en nuestro país vecino hasta Lisboa y, a partir de ahí, España invadiría la costa poco a poco, arrinconando a los portugueses hasta el mar. Eso sí, y viene incluido en el plan, era crucial que primero Franco se hiciese con Gibraltar, y así eliminar cualquier base británica antes del ataque. Pero, como todos sabemos a estas alturas, no es más que otro universo paralelo.