La colaboradora de Telecinco, Alba Carrillo, arrancaba las risas de sus compañeras esta semana en el programa 'La última cena' al desvelar cuál es el apodo que le puso a su ex marido, el tenista Feliciano López. Una de ellas era la propia presentadora, Paz Padilla, que tenía que salir al paso a explicar a la audiencia el por qué del 'mote' del deportista, entre las carcajadas de Fabiola Martínez, a su vez ex pareja de Bertín Osborne, y que también participaba del reality de cocina de Mediaset.

Lydia Lozano, Carmen Borrego, Cristina Cifuentes y Lucía Dominguín eran las protagonistas de la gran final del concurso de Telecinco, pero era la tertuliana de 'Ya es mediodía' y la empresaria venezolana las que acaparaban todos los focos. Sobre todo en un momento tan simpático como el que la colaboradora del programa de Sonsoles Ónega protagonizó al hablar de su vida privada.

El mote con el que Carrillo se refiere a su ex

Todo comienza cuando la presentadora gaditana se lanza a elogiar el vestido que la tertuliana y ex concursante de 'Gran Hermano' llevaba para el programa de esta semana, a lo que Carrillo respondió: “Cuando quieras te lo dejo, me lo regaló ‘Happy orto”. Un peculiar nombre que hacía referencia a quien había sido su marido durante un año. Un comentario que hacía estallar las risas tanto de Padilla como de Fabiola, por lo que la humorista explicó: “De feliz y ano”, por si había todavía algún espectador despistado.

El tono, todavía de humor, continuaba con la conversación sobre el propio vestido. “Algo bueno te dejan los ex”, bromeaba la invitada, a la que atribuyen un 'tonteo' con el chef del programa Miguel Cobo. Algo que comentó hasta la propia madre del cocinero, que descartaba a la colaboradora, asegurando que no la quiere como nuera.

La relación turbulenta entre Carrillo y Feliciano

Y es que el de ambos fue un matrimonio express que apenas duró más de un año. Los problemas los narró la propia Alba Carrillo en el reality 'Gran Hermano', en una conversación con Gianmarco Onestini, al que relataba las luces y sombras de la efímera relación, más a raíz de la boda del tenista con Sandra Gago. “Me casé con 28, a los 15 días cumplí 29 y a punto de cumplir 30, divorcio”. Un buen resumen de lo que supuso su relación con Feliciano y que posteriormente ha pasado a enumerar qué pasó para acabar finalmente separados.

Hablando sobre la infidelidad de Feliciano ha explicado: “Un día llegué a casa y me enganché con el marco de la puerta. Lo descubrí por fotos. Nunca lo ha admitido, salieron en prensa y de ahí tiras del hilo. Por eso a mí me da pena esta niña, él tiene una estructura planteada”. El italiano seguía sin entender nada, así que ha tenido que explicarle que estaba hablando de “la chica con la que se ha casado”.