Tarde de pocas opciones para los tres matadores, condicionada por la falta de casta de los astados de Álvaro Núñez

Finito lanceó con gusto al primero, al que recibió despegando el engaño con armonía y buen gusto. El toro, que ya se venía a menos desde su salida, dejó estar en una faena de muleta cargada de poso tras brindar al decano de los matadores cordobeses, José María Montilla. Así, probó por sendos pitones, concediendo tiempo y madurez a cada serie, dejando su aromático sello. Falló a espadas.

Ante su segundo, se topó con otro enemigo que le permitió lancear sendas verónicas de bello corte. Pero en la muleta apenas pudo materializar un par de series pero sin que la faena llegara a romper por falta de enemigo propicio.

Talavante dejó un saludo capotero cargado de variedad en las formas, intercalando verónicas, afarolado y pases al delantal para rematar con la media. Tras dos buenos primeros tercios, el toro, el de mejor condición de la tarde, se arrancó al torero que le citó a pies juntos para comenzar con un estatutario que abrió paso a un amplio toreo de muleta al natural.

Series hondas, con largura y plásticas, ejerciendo de principio a fin cada lance. Al menos, tres tandas completas de elevada factura taurina que abrieron paso a otra más con la diestra. Faena elegante y muy del corte que remató con mucho mando. Cortó un aoreja.

En el quinto, el diestro se encontró a un antagonista que no dio opción por su extrema mansedumbre.

Aguado, con el peor lote de toda la tarde, se enfrentó a un enemigo a contraestilo. Muy poca respuesta, más allá de un primer encuentro con la capa con verónicas acompasadas. De muleta, amén de la voluntad, poca historia.

Tras devolver al que cerraba plaza, saltó otro astado con el mismo hierro al que Aguado dejó una madura faena. Voluntarioso siempre y trabajando con virtud los terrenos, el sevillano, por encima de su enemigo, consiguió exprimir la inexistente casta de su contrario, al que pudo cuajar hasta cuatro series con la diestra con aplomo y mando. Faena relevante por la imagen apuntada del torero, que supo reponer y sacar de donde no había. Lástima que malograra con la espada.

La feria de Nuestra Señora de la Salud de Córdoba ha concluido hoy después de haber celebrado tres festejos, dos corridas de toros, celebradas hoy, en las que Roca Rey, con tres orejas, y Talavante, con una, se han erigido como máximos exponentes de una programación donde también salió airoso, con cuatro orejas el novillero Manuel Román.

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FICHA DEL FESTEJO

Córdoba, domingo 21 de mayo de 2023. 3ª de Feria. Un tercio de plaza.

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Toros de Álvaro Núñez, el sexto como sobrero, descastados en líneas generales. El segundo fue el único que medio se salvó de la quema.

Finito de Córdoba, ovación y ovación tras aviso.

Alejandro Talavante, oreja y silencio.

Pablo Aguado, ovación y ovación.