Leticia de las Heras Rojo

La directora ejecutiva de Greenpeace España, Eva Saldaña, ha lamentado en una entrevista con EFE previa a su ponencia en el congreso 'Tell Us Summit' del Club de Sostenibilidad de la Universidad de Navarra que gobiernos y empresas no terminan de dar pasos en firme con el compromiso ambiental, haciendo además de las medidas que llevan a cabo una publicidad engañosa.

En los últimos años, ha reconocido, se está viendo una evolución positiva en materia medioambiental por parte de las empresas europeas, sobre todo porque las propias leyes que se están poniendo en marcha no les dejan otro margen. Si bien ha asegurado que hay claramente empresas" que "están mintiendo y no están llevando a cabo una verdadera reducción de emisiones especialmente en lo que tiene que ver con la cadena de valor.

Este ecopostureo ('greenwashing'), ha asegurado, se da también dentro de la propia Administración pública; y es que muchas veces no terminan de saber cómo se avanza y tiñen sus políticas y acciones de un color verde cuando no lo es sin ser capaces de reconocer que están avanzando, pero queda camino por recorrer que no saben cómo afrontar.

En esta materia la Agenda 2030 cobra un gran protagonismo, una herramienta que ha valorado de forma positiva, puesto que está facilitando incorporar muchas de las demandas que llevan años planteando aunque a su juicio no marca las directrices ideales y no se está avanzando todo lo que les gustaría.

Precisamente la derogación de este plan de acción es una de las demandas del sector primario, un asunto en el que a su parecer no se ha planteado bien el problema, ya que el foco no deberían ponerlo en políticas ambientales que están pensando en el medio y largo plazo, intentando proteger el suelo, el agua y la biodiversidad, que es lo que va a sostener realmente el modelo agroalimentario.

A pesar de esto, ha reconocido las dificultades que están teniendo en la aplicación de las medidas procedentes de Europa y que hay ciertas cosas en las que tienen razón, como es su preocupación por el relevo generacional, qué hacer con productos que vienen de otros países y no tienen las mismas normativas, o todos los tratados internacionales como Mercosur o con los países del Pacífico en los que ellos se sienten en desventaja.

La movilidad, ha referido, es uno de los grandes retos actuales y aunque ha considerado que el vehículo eléctrico es un buen paso, ha advertido que este no debe ser visto como la solución, sino como una alternativa mientras se transita hacia un sistema totalmente electrificado que se enfoque en el transporte público y en el que se acabe con el modelo del vehículo privado.

En lo que respecta a los residuos, ha considerado que en España no se hace un buen tratamiento ya desde la base pues viene planteado siempre desde el reciclaje cuando tiene que pensarse desde el origen con la reducción del consumo.

Además, ha indicado, se da un porcentaje de reciclaje pequeño, especialmente en envases donde hay un monopolio muy concentrado en Ecoembes que, a su juicio, debería cambiarse y diversificarse.