Parecía que no, pero podríamos decir que la 'séptima' ola de covid-19 ha llegado. Estas últimas semanas, la transmisión de covid ha experimentado un ascenso, coincidiendo así con el avance de las dos nuevas variantes de ómicron: BA.4 y BA.5. Un avance, eso sí, que no solo estamos experimentando en España sino también en otros países del entorno europeo.

Son las personas mayores las que más siguen sufriendo la pandemia: los mayores de 75 años siguen teniendo la tasa más alta de COVID-19 y predomina el patrón de subvariantes ómicron BA.4 y BA.5, para las cuales las infecciones previas no protegen totalmente.

Un incremento del que ya alertó hace unas semanas el epidemiólogo y exdirectivo de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Daniel López Acuña. De hecho, el experto ya aseguro que había una "mayor proclividad a escapar de la eficacia de las vacunas" de las dos nuevas subvariantes de ómicron.

De hecho, ya por aquel entonces el exdirectivo de la OMS consideró que era necesario "estar alerta, vigilando, secuenciando y haciendo pruebas diagnósticas". Además, ya habló de estas nuevas variantes: "en la medida en que hay bajas coberturas vacunacionales en el mundo y población desprotegida y vulnerables, vamos a tener variantes que van a ser amenazantes, porque van a escapar de la eficacia de las vacunas".

Así las cosas, López Acuña reclamó "inteligencia epidemiológica" y pidió a las autoridades sanitarias que no obviaran realizar pruebas diagnósticas. "Hemos hecho muchas cosas equivocadas que nos han llevado a propiciar más contagios", lamentó hace unas semanas Acuña. De volver a hacer, sería como "ponerse una venda en los ojos", ya que el problema "lo tenemos que analizar para actuar rápidamente", agregó el epidemiólogo.

En una nota de prensa, SEMES asegura que los nuevos casos de coronavirus están provocando una "situación insostenible" en los servicios de urgencias, en un escenario "dinamitado" por la escasez de médicos y el reajuste de recursos por las próximas vacaciones estivales.

No obstante, admiten que el incremento de pacientes que acude a las urgencias hospitalarias también se debe a un mayor número de casos atípicos de infecciones respiratorias en estos meses del año y a la ola de calor que se extendió por todo el país durante la última semana.

Por todo, avisan de que "no hay camas ni profesionales" para hacer frente a lo que los urgenciólogos dicen estar presenciando en los servicios hospitalarios de todo el país.