Así es Maggie, la valiente perrita que, de milagro, sobrevivió a 17 balazos y se ha hecho famosa en Instagram
Una historia sobrecogedora de un animal que sacó fuerzas desde lo más profundo de su interior y consiguió salir adelante
Redacción CADENA 100
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Actualizado 00:41
Hay comportamientos de los seres humanos que no entran en el razonamiento de nadie, actitudes irracionales que son crueles y no tienen explicación. La perrita que presentamos a continuación fue víctima de uno de estos seres. Maggie tiene 5 años, es ciega, tiene una oreja mutilada y 17 heridas de bala por todo su cuerpo. Maggie nació en el Líbano y fue allí donde sus ángeles de la guarda la encontraron en muy malas condiciones encadenada, embarazada y abandonada a su suerte. Una historia sobrecogedora de un animal que sacó fuerzas desde lo más profundo de su interior y consiguió salir adelante.
Pero como la vida es imprevisible, después de una terrible tormenta llega la calma. La luz llegó a la vida de Maggie cuando sus las personas que la salvaron se cruzaron en su camino y tras esto, la suerte se puso de su lado. El caso ha sido tan mediático en Reino Unido que la organización benéfica de animales Wild At Heart, alertada por una petición vía redes sociales, se encargó de su rescate y su posterior recuperación.
Tras varias cirugías y diferentes tratamientos después, Maggie ha logrado salir adelante, demostrando una fortaleza y una capacidad de superación que terminaron por encandilar a Kasey Carlin, una joven voluntaria, de 25 años, que la adoptó y se la llevó a vivir a Brighton, Inglaterra. La relación de ambas es tan especial como sus historias, hasta el punto que aprovechando el escaparate público que son las redes sociales, han querido convertir sus historias en movimientos sociales de concienciación y ayudas. Maggie ya es conocida como la ''perrita terapia''.
Desde entonces, han pasado muchas cosas buenas en la vida de Maggie. Consiguió un hogar, una familia que cuida de ella y la adora, se hizo estrella en Instagram (con casi 300 mil seguidores), y, por si eso fuera poco, recientemente recibió el título de perro de terapia registrado. La perrita ha ayudado a muchas personas en este año y medio, ha tocado corazones y concienciado aún más la lucha de la protección de los animales y mascotas de compañía. Sientes y paceden, y pese a la crueldad a la que fue sometida, la perrita hoy es feliz y está envuelta en el amor de su familia de acogida y sus millores de fans.
Ahora, Maggie visita residencias, hospitales y universidades como perro de apoyo en terapias, y, también, acompaña a Kasey a las múltiples charlas motivacionales en las que su historia sirve de ejemplo para educar e inspirar a otros a hacer el bien.
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