Al plantearnos hacer unalimpieza general, encontramos suciedad en lugares inimaginables. Sin embargo, hay elementos que puede que no se nos pasen por la cabeza y que necesiten un buen lavado. La goma de la lavadora suele almacenar la humedad, siendo el punto de la casa con más probabilidad de que se pueda generar moho.

Este componente del electrodoméstico puede acumular bastante suciedad si no lo mantenemos correctamente. De esta manera, nos exponemos a que se transfiera a toda nuestra ropa. ¡Mucho ojo!

Una limpieza a fondo

Uno de los errores más comunes que cometemos es cerrar la puerta inmediatamente después de sacar la colada. Dejarla abierta será imprescindible para que se seque. Y, para acabar con la suciedad de la goma, solo se necesita un par de trapos y lejía de lavadora.

Pero no es necesario frotar, con lo que nos arriesgamos a romper la goma. Basta con empapar las telas en el producto y ponerlos sobre la zona que queremos limpiar. Cuantos más utilicemos, más profunda será la limpieza del electrodoméstico.

Tras esto, hay que dejarlo actuar durante una hora. Una vez transcurrido ese tiempo, habrá que retirarlos para dar un último lavado. Con un poco de gel, incluso con un chorro de vinagre blanco, programaremos un ciclo de lavado largo con la temperatura más alta que permita el aparato.

Siguiendo estos pasos, y rematando con la limpieza del cajón, dejaremos nuestra lavadora impoluta.

La odisea de eliminar algunas manchas

Continuando con la ropa, hay manchas que, por muchos lavados que tratemos de dar, parecen imposibles de quitar. Hay una que es más habitual en verano y es la provocada por la crema solar. En esta estación del año, se vuelve rutina echarse una buena cantidad de protector solar para ponerse el bañador y saltar al agua.

Estos accidentes pueden ocurrir, sobre todo con los niños, que se muestran impacientes de salir a la playa o a la piscina cuanto antes. La clave para eliminar estas manchas no podría tenerla otra persona más que Begoña Pérez, más conocida como 'La Ordenatriz'. Es común que todos los elementos que llevamos a la playa estén impregnadas de pequeñas gotas amarillas, provocadas por la crema.

El primer paso que habría que dar al detectarla en nuestra ropa es quitárnosla y lavarla inmediatamente. Si no es posible por falta de medios, 'La Ordenatriz' te da otras alternativas, además del método infalible para acabar con ellas en casa. Descúbrelo en el siguiente audio: