Ganar la lotería siempre se traduce en un símbolo de alegría. Muchas de las personas agraciadas por este premio, tienen dinero y un poco más no les biene nada mal para seguir viviendo con tranquilidad, aunque a otras parece solucionarles la vida, pues te embolsas una cantidad que nunca habías pensado tener. Esta acción también supone una gran satisfacción para la empresa que lo proporciona, pues consigue el prestigio y hace que los ciudadanos acudan en masa a ella a probar suerte, aunque no todo es siempre tan fácil.

Y es que, el pasado 19 de julio, un acertante del sorteo de Euromillones se llevaba consigo un bote de, exactamente, 230 millones de euros con un boleto validado en Reino Unido. Un día después, el flamante ganador hizo lo más normal en este tipo de situaciones, ir a cobrar el premio: 195 millones de libras al cambio. Pero minutos más tarde todo cambió. Formby, una ciudad de Merseyside se veía rápidamente invadida por el rumor de el boleto había sido validado allí mismo. Es más, uno de los empleados de una tienda de licores llegó a confirmar que él mismo había recordado vender ese boleto y alegaba haberlo mirado y comprado que los números eran correctos.

Pero la historia no acaba aquí. La tienda recibía más tarde una carta anónima escrita a mano en la que una persona afirmaba haber comprado ese mismo número. ¿Dónde? En Escocia. Esta decia lo siguiente: "Querido Bargain Booze, no sé de dónde sacáis la idea de que el boleto de Euromillones se compró en vuestra tienda. Yo soy ese ganador y compré el boleto en Paisley. ¡Sólo para que conste!"

Gana 1,2 millones de euros en la lotería y deja a todos de piedra al revelar el consejo que le ayudó a ganar

No es la primera vez que este tema da de qué hablar. Hace apenas unos días un ciudadano británico, Robert Cameron, se hacía con 1,2 millones de euros, algo normal aparentemente. Pero lo que resulta interesante es el cómo, el cual tiene que ver con temas familiares. En su caso con el consejo que le daba su difunta madre. Precisamente el día anterior, Cameron tenía 3,70 libras para comprar dos boletos más, un movimiento acertado con el que consiguió este gran premio.

Al día siguiente, consultó la aplicación y de primeras creía haber visto reflejada en su pantalla la cantidad de mil libras, aunque tras mirar de nuevo, se dio cuenta de la verdadera cantidad que había conseguido acumular. Ahora bien, ¿qué piensa hacer con el premio y por qué? Ni más ni menos que comprarse un coche, una casa e irse de vacaciones ya que su madre siempre le decía lo siguiente: "Si ganas algo, tómalo y gastaló en otra cosa".