Manolo Lama recordó en La Tarde de COPE a Diego Armando Maradona, sus momentos históricos y sus puntos más negros, poco después de conocer el fallecimiento del crack argentino: "Sus excesos le han impedido vivir un final de vida más bonito del que ha llevado. Su legado no se va, lo que nos deja va a ser irrepetible. Después de Di Stefano, es uno de los grandes que se ha marchado, pero va a quedar sus genialidad, regates, asistencias....eso va a quedar siglos y siglos".

VÍDEO: Lama recuerda lo que ha significado Maradona para la historia del fútbol

Gol histórico a Inglaterra

Escuchando la histórica narración de Víctor Hugo Morales del gol de Maradona a Argentina en el Mundial de Mexico 86, Lama reconoce que "eso va a quedar para siempre. Ese gol lo mete Argentina, un pueblo que estaba en conflicto con Inglaterra y aquel gol lo empujaba cada argentino. Ese día también mete el gol de la famosa mano. Ese guion no lo escribe ni el mejor de lo literatos argentinos. Gol con una belleza plástica, una definición... y a quién se lo marcaba y cómo se lo marcaba".

Su paso por Barcelona

Lama habló también de su paso por el Barcelona, donde estuvo una temporada: "Protagonizó episodios tristes pero fue algo tremendo que fichara por el Barcelona, que llevara una camiseta que había llevado Cruyff-. Nos daba un salto de calidad como la mejor liga del mundo. No ganó la Liga pero nos regaló imágenes tremendas. Su salida fue convulsa y problemática, pero era Maradona. Era Diego para lo bueno, bueno… y para lo malo, malo. En Nápoles vimos su esplendor en lo mejor y en lo peor. Recuerdo la final de la Copa del Rey contra el Athletic de Clemente, con la tangana que hubo que dio la vuelta al mundo, el gol de Maradona en el Bernabéu pisando la pelota en la línea de gol… nos ha dejado imágenes icónicas que no se van a olvidar nunca".

Maradona será recordado siempre por la gran belleza de sus jugadas: "Estéticamente era uno de los futbolistas más bonitos de ver. Era elegante, con la cabeza alta, marcaba muy bien su silueta en el terreno de juego, la pegaba como los ángeles y se inventaba cosas que no habíamos visto, como un gol al Estrella Roja que cuando llega delante del portero y le hace una vaselina que nos impresionó. Cogía la pelota y gambeteaba a los rivales como si fueran conos. Conducía la pelota, regateaba y evitaba las patadas que le soltaban".