Un joven de Cádiz compra un chándal de segunda mano y se lleva una sorpresa cuando le llega: "Del paleolítico"
El usuario de Vinted compartió en su cuenta de X los mensajes que intercambió con el propietario de la prenda y este último justifica su error como una equivocación "de su madre"
Tiempo de lectura: 2'Actualizado 06:38
La moda circular y la compra de prendas confeccionadas están en auge y cada vez más personas se suman a esta tendencia de consumo consciente, optando por prendas de segunda mano. Son muchas las plataformas que existen para hacer shopping de forma sostenible. Aunque a veces no sale bien, como a este joven de Cádiz con un chándal.
Suele ser una excelente alternativa para aquellos que desean renovar su armario de manera responsable y obtener prendas de calidad a precios asequibles. Además, hay algunas plataformas que realizan un proceso de verificación y autenticación de todas las prendas para garantizar su calidad y autenticidad. En este caso, está claro que no pasó.
Las plataformas como Wallapop, Vinted o Vestiaire Collective también se están convirtiendo en una alternativa cada vez más extendida a las tiendas habituales. Comprar ropa usada ya no es considerado algo cutre; más bien, al contrario, ahora es de lo más cool.
La mayor conciencia ecológica y la inflación disparada tienen mucho que ver con cómo está cambiando nuestra forma de ver la segunda mano. Se ha asumido la utilización de ropa usada como algo natural. Uno de cada cinco españoles ya compra estas prendas, según apuntan desde la Asociación Española de Recuperadores de Economía Social y Solidaria.
De segunda mano
Un ejemplo es lo que hacen desde la AERESS. La gestión de los residuos textiles empieza con la recogida de la ropa de los contenedores a nivel local, por parte de las entidades colaboradoras. A partir de ahí, hacen una planificación para la reutilización y preparación de las prendas recogidas, mediante un triaje para decidir si se pueden volver a usar.
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Si no se puede, se le da una nueva vida a esa prenda reciclando las fibras textiles. Una vez recuperada esta ropa usada, se preparan para darles salida al mercado, una vía de ingresos para las entidades, que contribuye al consumo sostenible y a la generación de empleo.
Según el último informe 'La Red del Cambio', realizado por Wallapop y Kantar, casi la mitad de los consumidores, un 43%, ya consideran los productos de segunda mano cuando se enfrenta a una decisión de compra y seis de cada diez se plantean comprar más productos de este tipo de los próximos tres años.
En línea con sus estrategias de sostenibilidad y para competir con estas plataformas, los gigantes de la industria de la moda empiezan a entrar en el mercado de la segunda mano. Zara lo ha hecho el pasado mes de diciembre, Shein está a punto de sacarla y H&M tiene ya una colección en la tienda del Paseo de Gracia de Barcelona.
Se lleva una sorpresa cuando le llega
Si algo ofrecen estas tiendas es un punto más de seguridad en comparación con las aplicaciones de tu teléfono móvil. Si no, que le pregunten a un usuario de Vinted que compartió en su cuenta de X los mensajes que intercambió con el propietario del chándal de C. Tangana que compró, pero con el que se llevó una sorpresa cuando le llegó.
No había chándal, había un maletín "del paleolítico", como explicaba el afectado. Este joven de Cádiz compartió también el resto de la conversación que había mantenido con el vendedor, que justificó su error como una equivocación "de su madre". Esto suscitó muchos comentarios en la red social.
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