La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha llevado a cabo un golpe contundente contra el contrabando de tabaco en España. En una operación coordinada en Madrid y Córdoba, han desmantelado dos fábricas clandestinas de tabaco, desarticulando así una red internacional dedicada al comercio ilegal de cigarrillos y al lavado de dinero.

La intervención ha resultado en la detención de 20 individuos y la liberación de 11 trabajadores búlgaros que estaban siendo explotados en condiciones inhumanas en una de las instalaciones. Las autoridades lograron incautar aproximadamente 33 toneladas de hoja de tabaco y 6 millones de cigarrillos falsificados, destinados presumiblemente al mercado negro en Portugal y Francia.

Lo más alarmante es la sofisticación de estas operaciones ilegales: las fábricas desmanteladas estaban equipadas para llevar a cabo todas las etapas de producción, desde el procesamiento de la hoja de tabaco hasta el empaquetado y la distribución. En particular, la fábrica de Humanes de Madrid reveló una realidad desgarradora: los trabajadores estaban encerrados en el lugar, sin poder salir durante su estancia en España.

En un esfuerzo por ocultar estas actividades criminales, los responsables construyeron falsos muros y escondites para evadir la detección policial. La cooperación internacional fue fundamental en esta operación, con la participación de agencias como EUROPOL, OLAF y la Agencia Estatal de Seguridad Nacional de Bulgaria.