En un duelo donde la épica se conjugaba con la necesidad de remontar una desventaja considerable, el Ciudad de Huelva se enfrentó al Zamora Enamora con la esperanza de revertir el marcador y avanzar en los playoffs hacia la codiciada LEB Oro. Sin embargo, pese al coraje y la entrega mostrada por los onubenses, el desenlace no favoreció a los visitantes, quienes se despiden de la temporada tras una eliminatoria repleta de emociones y esfuerzos titánicos.

Desde el pitido inicial, el Zamora impuso su ritmo en la cancha del Ángel Nieto. Con un juego preciso y contundente, los locales lograron acumular una ventaja temprana, dejando al Ciudad de Huelva en la difícil tarea de remontar una brecha cada vez más amplia. Al término del primer cuarto, el marcador ya reflejaba una distancia considerable a favor del Zamora, 23-13 a favor de los locales, un augurio sombrío para los visitantes.

Ante la adversidad, el Ciudad de Huelva no se dejó intimidar y encontró en la figura de Javier García un líder dispuesto a plantar cara en el segundo cuarto. Con tiros certeros y una determinación inquebrantable, García inspiró a sus compañeros a luchar, buscando recortar la ventaja del Zamora. Sin embargo, la descalificación del entrenador Íñigo Núñez añadió un obstáculo más en el camino del equipo visitante. A medida que avanzaba el encuentro, el Zamora demostraba por qué se mantenía como el equipo dominante en la serie. Con una defensa sólida y un ataque incisivo, los locales ampliaron su ventaja en el tercer cuarto, dejando al Ciudad de Huelva en una situación cada vez más complicada, con un 77-59. A pesar de los esfuerzos del equipo visitante por mantenerse en la contienda, el tercer cuarto concluyó con una brecha considerable a favor del Zamora, una montaña que parecía imposible de escalar para los onubenses.

Con el orgullo en juego, el Ciudad de Huelva se negó a rendirse y ofreció una última demostración de su espíritu luchador en el cuarto final. Aprovechando la relajación momentánea del Zamora, los visitantes lanzaron un ataque feroz, recortando la diferencia y mostrando su espíritu hasta el último segundo. Aunque el esfuerzo no fue suficiente para cambiar el resultado final 93-87, el Ciudad de Huelva se retira del enfrentamiento con la frente alta, dejando una huella de coraje y ganas en la cancha del Zamora.

A pesar de la eliminación, los onubenses pueden marcharse con la satisfacción de haber dejado todo en la cancha y haber mostrado una actitud digna de elogio en cada momento. Ahora, con la temporada finalizada, el Ciudad de Huelva mira hacia el futuro con la ilusión de construir sobre los cimientos que se han establecido durante esta primera temporada en LEB Plata.