Es el vehículo más famoso de Vélez-Málaga en los últimos días: un coche fúnebre que está aparcado en plena calle con un ataúd dentro. El asunto parece sacado de un macabro guion cinematográfico; una broma de mal gusto. Lo cierto es que el malestar reina entre los vecinos de una mujer que, a falta de plaza de garaje, aparca su adquisición en plena calle.

NO ES IDÓNEO

Fue un vecino de la localidad quien contactó con el Ayuntamiento de Vélez-Málaga porque el coche fúnebre llevaba varias semanas estacionado en la vía pública. La Policía Local se desplazó al lugar y habló con la propietaria. Según fuentes municipales, le hicieron ver que no es lo idóneo aparcar un coche fúnebre en la calle, con un féretro dentro (evidentemente, se entiende que un féretro vacío).

SIN REGULACIÓN

¿Y por qué esa mujer tiene un coche fúnebre... y qué hace en la calle? Pues la propietaria explicó que lo había comprado para hacer un cortometraje. Y hasta ahí la historia, porque las ordenanzas municipales no regulan nada sobre el estacionamiento de este tipo de vehículos en la vía pública. Así que el ayuntamiento y la Policía Local poco más pueden hacer puesto que la dueña del coche no está incumpliendo ninguna norma.