Quince años sin Marta. Quince años de ausencia en una familia que nunca ha dejado que se apague su recuerdo y que siempre ha luchado porque se haga justicia y se sepa toda la verdad.

Este miércoles 24 de enero es un día complicado para los padres de la joven asesinada, Antonio y Eva. Se cumplen ya quince años de la desaparición de su hija y, aunque el tiempo avanza, el recuerdo de Marta sigue vivo en la que fuera su casa y también en Sevilla, una ciudad que no olvida y que siempre ha arropado a la familia.

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Es lo que ha ocurrido una vez más. Este miércoles, señalado en el calendario como un día negro y triste, familiares, amigos y ciudadanos anónimos se han unido en una concentración a las puertas del Juzgado de Sevilla para recordar a la joven y para volver a pedir justicia.

Encabezando esa concentración ha estado el abuelo materno de Marta, José Antonio Casanueva, un hombre incansable, que ha dedicado su vida desde que desapareció su nieta a buscar el cuerpo de la joven y a mantener viva su memoria y su recuerdo.

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Es una especie de “abuelo coraje” y siempre ha contado con el apoyo y el cariño de los sevillanos.

Pero no solo de los sevillanos, sino también de los españoles, como le ha recordado una mujer gaditana que este miércoles ha participado en la concentración convocada en recuerdo de Marta en los juzgados de Sevilla.

Esta gaditana ha querido además tener un detalle con el abuelo de Marta. Le ha entregado un llavero donde por delante aparece el rostro de su nieta y por detrás una frase que dice “Con cariño para el abuelo de Sevilla”.

La joven ha abierto su corazón a José Antonio Casanueva y ha mostrado su admiración y respeto con una emotiva declaración: “Ojalá yo hubiera tenido un abuelo como usted, porque por desgracia, no conocí a ninguno”.

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Marta, de 17 años en el momento de su desaparición, fue vista por última vez el 24 de enero de 2009. A pesar de los intensos esfuerzos de las autoridades para esclarecer su paradero, su cuerpo nunca ha sido localizado y solo cumple condena el asesino confeso, Miguel Carcaño, condenado a 21 años de cárcel y que cambió su versión del crimen hasta en siete ocasiones.