El presidente de la Asociación de Vecinos del barrio de El Coto, Christian Guisado, fue muy descriptivo con lo vivido durante 28 meses. "Era como estar en el lejano oeste. Fue un auténtico calvario soportar las obras en la calle. Aceras rotas, polvo en las viviendas; entre vallas y con la imposibilidad de caminar por la zona con normalidad, para muchas personas mayores que viven en el barrio", recordaba el líder vecinal. A toda esa descripción se añade el hecho de que en la calle Calderón de la Barca hay un centro de educación infantil, un colegio y un instituto de educación secundaria. Muchos padres de alumnos no pudieron llevar a sus niños a clase, con normalidad. Y las personas mayores, descartaban llevar a sus nietos hasta el colegio o ir a buscarlos.

Una larga historia de obras

Todo empezó en el mes de octubre del año 2021. En esa fecha se adjudica la obra de la calle Calderón de la Barca, bajo el gobierno del PSOE. El Partido Socialista, junto a su socio de gobierno Izquierda Unida, llegó a desviar fondos que estaban destinados para esta obra, hacia la construcción del "cascayu" del paseo de San Lorenzo, para crear espacios abiertos durante la pandemia del Covid-19. La adjudicación de la obra se otorgó a la empresa Cotovisa. El plazo para finalizar las obras era de ocho meses. En su día, la empresa pidió una prórroga para finalizar los trabajos porque no recibía materiales y finalmente se acabó suspendiendo el contrato.

A partir de ahí, hubo una laguna temporal, en la que ni se contrataba una nueva empresa, ni se daba solución a las demandas de los vecinos, que veían como la calle estaba levantada, en obras, y sin visos de solución.

Cambio de gobierno y solución al problema

El cambio de gobierno permitió que Foro y PP desatascasen la situación. Se hizo una nueva adjudicación de la obra, en el mes de agosto del año 2023. Dos meses después de constituirse el nuevo gobierno del Ayuntamiento de Gijón. Las obras se adjudicaron a la empresa ARPOSA60 SL. Se le dio un plazo de seis meses para concluir las obras, y la nueva adjudicataria entregó todos los trabajos a los cinco meses. Con lo que la calle Calderón de la Barca se puedo entregar a los vecinos, el 21 de febrero de 2023: festividad de San Pedro Damián. Un santo al que los vecinos del Coto pondrán velas, a partir de ahora, junto a su habitual devoción por San Nicolás de Bari, que da nombre a la Parroquia del barrio, en la calle Avelino González Mallada.

Los vecinos satisfechos, pero "en guardia"

Han pasado tantos meses que los vecinos de El Coto están contentos, pero no se acaban de creer que la calle esté finalizada. Dicen que ya hay algún problema, con el asfalto y el concejal de Infraestructuras, Gilberto Villoria, promete máxima atención al estado de conservación de la calle. "Hay dos árboles que parece que están muertos, por lo que no se ha asfaltado el tramo, para que puedan ser sustituidos. Y hay que cambiar una farola porque un coche la ha derribado, tras un accidente", apunta el responsable de Infraestructuras del Ayuntamiento de Gijón.

Los vecinos aprovecharon la presencia del concejal para recordarle que la plaza de la República es otro punto del barrio que necesita mejoras. Unas obras que ya se había prometido hace años.