La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, ha asegurado que la variante ferroviaria de Pajares, que supone la llegada del AVE a Asturias, estará lista "en torno" a los meses de julio o agosto de este año. Así lo ha indicado Sánchez este martes en el pleno del Senado, donde ha afirmado que el proceso se encuentra "en la recta final" y que están acelerando "todo lo posible" para que los trenes de Alta Velocidad estén en funcionamiento antes del verano.

La ministra ha explicado que aún están pendientes de las pruebas de homologación de seguridad a cargo de la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria y que "no van a correr" en cuestiones de seguridad.

En un principio estaba previsto que en la segunda quincena de diciembre se entregara la vía de la que se ha convertido en la mayor obra civil del país, que incluye un túnel de 25 kilómetros bajo la Cordillera Cantábrica en la que se han invertido casi 4.000 millones de euros y que permitirán que el AVE una Oviedo y Madrid en algo más de tres horas.

Sin embargo, problemas con los suministros de materiales, sobre todo de carácter eléctrico, y el incremento de los precios de las materias primas retrasaron los objetivos que se había marcado el ministerio en junio del pasado año.

La ministra Raquel Sánchez, acusada este lunes por la senadora María Mercedes Fernández (PP) de "escudarse" en las cuestiones de seguridad para atrasar la puesta en marcha de la Alta Velocidad, ha respondido que el Partido Popular fue quien anunció que la Alta Velocidad entraría en servicio en 2015 y que no lo consiguieron, ni ese año, ni en 2018.

Según Sánchez, la variante de Pajares es la obra "más emblemática" en marcha que, gracias a la inversión de más de 3.800 millones de euros, va a permitir que Asturias cuente con servicios de alta velocidad equiparables "en prestaciones, en tiempo y en todo" al de las grandes ciudades españolas.

Preguntada sobre cuándo conoció el error en los gálibos de la infraestructura en la declaración sobre la red de Adif, en función de los cuales se iban a construir los nuevos trenes de cercanías de Cantabria y Asturias, la ministra de Transportes ha asegurado que, desde que ha tendido conocimiento de los hechos, ha tomado "cartas en el asunto", ha "asumido responsabilidades" y las "depurará hasta las últimas consecuencias".