El tabaquismo sigue siendo la mayor causa de mortalidad en España, con más de 61.000 muertes cada año. Un hábito muy extendido entre más del 22% de la población. Sin embargo, cada vez hay más métodos para ayudar al usuario a desintoxicarse: parces, chicles de nicotina, ejercicio físico... y también medicamentos. Al ya conocido 'todacitán', se le une el 'recigarum', un fármaco similar que ha sido introducido el pasado mes de noviembre en el sistema de salud canario.

El tratamiento tiene una eficacia probada y ayuda al usuario a dejar el hábito en un plazo de 25 días. Está totalmente financiado por el Ministerio de Sanidad y para adherirse a él, será necesario hacerlo por la Plataforma de Ayuda al Fumador Canario (PAFCAN).

El médico de atención primaria del Centro de Salud de Miller Bajo, en Las Palmas de Gran Canaria, Ramsés Martín, ha comentado en COPE Canarias que su efectividad es incuestionable: “Un 7 6% de las personas que han comenzado el tratamiento han conseguido dejar de fumar. Pero con el medicamento solo no vale. El fumador tiene que poner de su parte para dejar el hábito”.

El coste del tratamiento es de 111,09 euros, totalmente sufragados por el Sistema Nacional de Salud. Al igual que el Todacitán, el usuario debe tomar un comprimido cada dos horas al principio, reduciendo su ingesta progresivamente conforme el paso del tiempo.

Un tratamiento que apoya a la fuerza de voluntad

Sin esfuerzo no hay éxito. Y en el tema del tabaquismo, esto queda todavía más claro. “Si los usuarios creen que con el recigarum tendrán solucionados sus problemas, se equivocarán”, desvelaba Ramsés Martín. Los pacientes deberán estar motivados para hacer realidad el esfuerzo y, por supuesto, forzarse a dejar de fumar por su propia voluntad, como muy tarde, al quinto día de comenzar el tratamiento y no retomarlo, ya que podrían verse incrementados los efectos secundarios del recigarum.