Ayer se reunía el Comité de Empresa de Guaguas Municipales para buscar una solución a los actos vandálicos que está sufriendo el transporte público al paso por algunas zonas de la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria, especialmente en el cono sur. Es el caso de la Calle Córdoba.

Desde el Comité han insistido en que "si vuelven a repetirse los ataques cambiarán el itinerario" de las líneas afectadas, que en este caso han sido la 12 y la 9, siendo la primera la que más daños ha tenido.

Han sido 6 agresiones en lo que va de año, una buen aparte en la línea 12, pero desde enero de 2019, 168 actos vandálicos. Algo que el portavoz del Comité, Rafael Marrero “no puede permitirse”.

El pasado miércoles unos jóvenes volvieron a tirar piedras a un vehículo de transporte público. Este propició que se rompiera una ventana y se averiara el aire acondicionado. Según Rafael Marrero, “en la reunión hemos acordado que si estos sucesos vuelven a repetirse, a la primera, cambiaremos el itinerario de la guagua y pasará por la Calle Alicante, una vía con mayor seguridad”.

A pesar de esto, desde Guaguas Municipales esperan no tener que llegar a esta resolución y que los servicios de seguridad puedan localizar y detener a las personas que están causando daños al transporte, que según han apuntado tanto los conductores de las guaguas afectadas como vecinos de la zona, “se trata de jóvenes haciendo gamberradas”.

Los vecinos de la zona también han buscado soluciones para que no cambien la ruta. Óscar Roque, presidente de la Asociación Vecinal del Cono Sur asegura que "el cambio a la calle Alicante sería muy negativo para los residentes de la zona, sobre todo para los mayores, ya que esta calle está en obras y el paso sería complicado".

Por ahora pendientes de si finalmente los hasta 7.000 vecinos y cerca de 5.000 visitantes - datos aportados por el presidente de la asociación vecinal- de la zona tienen que sufrir las consecuencias de los vandalismos que llevan a cabo unos pocos jóvenes.