El llamado "mejor amigo del hombre" (o de la mujer) lo es a lo largo de toda su vida. Y es lo que se ha puesto de manifiesto en la iniciativa “Dando vida a los años” de la Asociación de iniciativa social GUDCAN, un programa de envejecimiento activo desarrollado a través de procesos de terapia asistida con perros.

Una vez a la semana, los usuarios de la residencia Sagrado Corazón de Jesús, de la Diputación de Cuenca, tienen una visita muy especial. Se trata de Febrero, un perro muy sociable que participa en la terapia.

Luis Huerta, director de Gudcan, nos cuenta que Febrero es un compañero muy especial, es el hilo conductor y el elemento motivador de las sesiones. "Nuestros proyectos están basados en la metodología de la presencia de un perro que es la clave de todo el trabajo".

Los residentes esperan ese día con interés, "según entramos por la residencia es un amigo más, desde la zona de recepción, cuando vamos andando por los pasillos, la presencia de Febrero mejora el clima cálido de cualquier recurso donde trabajamos y cuando llegamos ya nos están esperando nuestros usuarios con muchas ganas".

Huerta añade que "lo que hacemos siempre es primero hablar de cómo les ha ido la semana. Les damos voz a sus sentimiento, a sus emociones. La idea es que ellos puedan contarnos cómo están, cómo se sienten, qué es importante para ellos y a partir de ahí, con nuestro equipo de psicólogas, vamos yendo hacia la actividad que queremos trabajar ese día".

La terapia no es solo jugar con el perro, tocarlo o acariciarlo, sino que, como el perro es el eje central, se hacen muchas actividades en torno a él. El director de Gudcan nos pone un ejemplo "no es lo mismo hacer una actividad en la que les pedimos a los mayores meter un hilo por unas piezas, a que les digamos que hoy vamos a preparar un collar para Febrero y lo vamos a hacer con una secuencia de colores azul, rojo, verde. Y a ellos les ilusiona hacer esa actividad porque el fin es hacer que Febrero, que es su amigo, esté más guapo".

Escucha la entrevista completa pinchando en la foto de portada