En COPE Ávila hablamos de unas Navidades diferentes a las que muchos tenemos en mente para los próximos días, pero no por ello menos especiales y mágicas: Las Navidades que van a vivir los 18 niños y jóvenes adolescentes que residen en las dos casas de acogida de Mensajeros de la Paz en Ávila.

Magnolia González, que es la coordinadora de ambas casas de acogida, ha contado en COPE que pese a las circunstancias personales y complicadas de cada uno de ellos son las Navidades de “una gran familia”, decoran la casa, cantan villancicos y preparen comidas especiales, como en cualquier encuentro familiar navideño.

Los 18 niños que componen esta “gran familia”, tienen entre 10 y 17 años. Algunos llevan cerca de nueve en ambas casas de acogida, para otros es el primer año, para estos últimos, Navidades son algo más “complicadas”, dice Mangnolia, por eso les “arropan” de forma más especial.

Destaca Magnolia que también son unas Navidades “felices” para los 14 trabajadores de Mensajeros de la Paz “que comparten su tiempo y alegría” estas fechas con los niños.

La Navidad de Montse en la primera casa de acogida de Mensajeros de la Paz en Ávila en 1975

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Sí alguien sabe de Navidades diferentes en una casa de acogida, es Montse Sánchez, porque ella fue una de los 14 niños que estuvo en la primera casa de acogida de Mensajeros de la Paz de Ávila que en 1975 creo el Padre Ángel y que, casualidades de la vida, estaba en el lugar que hoy ocupan los estudios de Cope Ávila. Como curiosidad, en el actual estudio de COPE Ávila estaba la habitación de los chicos o en el control de sonido la capilla.

Montse llegó a esta casa de acogida con tan sólo cinco años junto a su hermano mayor y en ella estuvo hasta los 13 años. A pesar de las difíciles circunstancias de su familia, asegura que atesora recuerdos muy “bonitos” de esos años. Entre ellos sus primeras Navidades, las primeras en las que tuvo un juguete y las primeras en las que vio a los Reyes Magos.

Asegura Montse que las tres monjitas que cuidaban de estos 14 niños se esmeraban en organizar unas Navidades que, cómo el resto del año, vivían como “una gran familia”.

Para Montse la casa de acogida del Paseo Dos de Mayo era su “hogar” y los 13 niños con los que convivía sus “hermanos de niñez” como así se siguen llamando años después.

Montse, que ahora tiene 49 años, se siente orgullosa de haber sido una de las niñas que vivió en la primera casa de Mensajeros de la Paz en Ávila.