La Asociación Leonesa de Caridad ha cumplido 117 años de dedicación a las personas más necesitadas de León a través del Comedor Social y otros servicios que presta. Más de cien años de compromiso con la sociedad leonesa y atendiendo las necesidades básicas de alimentación e higiene de personas en situación de necesidad y transeúntes.

Para repasar su historia y conocer mejor su funcionamiento, Felix Llorente, presidente de Asleca, participa en el espacio "Entre Nosotras" de Mediodía en COPE León.

Fundación

La Asociación Leonesa de Caridad es una institución de carácter benéfico creada en el año 1906 por iniciativa de la Junta Directiva de la Cruz Roja Española en León, ubicada en la Casona de Puerta Obispo y regida por la Comunidad de las Hijas de la Caridad con el apoyo de cerca de cien personas voluntarias.

Un año más tarde abrió sus puertas su Comedor de Caridad en la Casa de los Cabero en la plaza de Puerta Obispo, actual sede de la entidad, a cargo de la compañía de la Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl. A partir de esta fecha, algunos hitos importantes de la Asociación Leonesa de Caridad son su catalogación como Institución de Carácter Benéfico-Particular por Real Orden de 31 de diciembre de 1925 y que el 8 de mayo de 2004, con motivo del Día Mundial de la Cruz Roja y la Media Luna Roja, recibió la Medalla de Oro de Cruz Roja Española. Además, el 14 de abril de 2011 recibió la Medalla de Oro de la Ciudad de León “por sus cien años de servicio y atención a las personas con mayores necesidades”.

Por otro lado, la Casa de Acogida para mujeres víctimas de violencia de género y personas a su cargo de la Asociación Leonesa de Caridad funciona desde 1987 y forma parte de la Red de Centros de Acogida de la Junta de Castilla y León. En este momento atiende a dos mujeres con sus hijos.

Comedor social

El comedor social es el buque insignia de los servicios que presta Asleca y cada día ofrece más de cien servicios sólo de comedor, a los que se suman los de desayuno y cena, dirigidos a personas sin recursos.

Actualmente trata con personas "con problemas psíquicos, morales, intelectuales, familiares...a lo que hay que añadir drogadicción y alcoholismo", que demandan comer como primera necesidad, aunque también cariño.

Todos los días atienden al desayuno a unas 50-60 personas, 100-120 a mediodía y para cenar entre 70 y 80 personas. En el balance del año 2022, 800 personas recibieron más de 81.000 servicios.

Desde sus inicios como comedor de caridad, las aportaciones económicas y de alimentos de donantes particulares, socios de la Asociación Leonesa de Caridad, empresas leonesas, entidades bancarias, supermercados afincados en León, parroquias, cofradías, colegios, instituciones, Banco de Alimentos, así como las ayudas de Ayuntamiento de León, Diputación y Junta de Castilla y León son el sustento de los servicios que presta Asleca. Como dato de referencia, el gasto diario del comedor supera los 1.800 euros.

La Casa de acogida sufrió una reforma, para la construcción de cuatro apartamentos para 13 personas y se renovó la instalación eléctrica y de fontaneríade la cocina para adecuarla a las necesidades actuales y a la demanda del Comedor Social gracias a los fondos europeos Next Generation. Los trabajos se realizaron a lo largo del mes de agosto y septiembre de 2023.

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El Comedor Social está ubicado en la Casona de Puerta Obispo, con acceso por la calle Maestro Copín, en la capital leonesa.

Tanto el Comedor como el Centro Social están atendidos por las Hijas de la Caridad y 80-100 personas voluntarias, especialmente mujeres, fijas entre 15 y 25.

Félix apunta que ve muy difícil que funcione sin las Hijas de la Caridad porque "allí hay que estar mañana, tarde, día y noche, los 365 días del año". Cuando ellas falten, será inausible económicamente, aunque siempre "quedará la buena voluntad y las ganas de funcionar".

10 años como presidente

Tras 10 años al frente de Asleca, Félix afirma que "en lo moral, en lo intelectual y en la idea...yo seguiría ad eternum, pero en lo físico, en lo cotidiano, en las fuerzas, en las ilusiones, pues van quedando muchas cosas por el camino, van quedando heridas que te marcan, ayudas que esperas y no llegan, proyectos que quedan en el aire, y todo eso te va minando" por eso espera que algún día alguien joven y con ilusión le de el relevo, aunque siempre quedará ligado a la asociación.

Féliz termina subrayando que "ya lo decían los clásicos: "Lo único que queda en esta vida, es el bien que se haga", y ahí en esa casa, de verdad, hacemos todo el bien que podemos".