El semáforo es una de las señales más importantes que regulan la circulación. Con sus luces indican quién debe pasar o detenerse: en el caso de un peatón, cuándo debe cruzar una calle y en el caso de un conductor, cuándo debe esperar porque es el turno de las personas o cuándo circular. Pero es su estética la que ha llamado la atención de este joven de Madrid.

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Tan queridos cuando los encontramos en color verde, como odiados cuando están en rojo, los semáforos se han convertido en un complemento indispensable al tráfico en las ciudades. Su historia se remonta 155 años atrás, cuando de la mano del inventor John Knight se instaló el primer semáforo en Londres, frente al Parlamento de Westminster.

En este caso era accionado manualmente por un policía local y funcionaba con dos lámparas de aceite. La explosión de una de ellas hizo que dejase de usarse hasta que en 1914 se instaló el eléctrico, que funcionaba mediante un juego de luces en Cleveland, Estados Unidos. Este ya se parece más a esos que vemos ahora por Gran Vía.

En España, la duración de los semáforos suele oscilar entre los 12 y los 90 segundos, todo depende del color. Generalmente, los peatones tienen unos 12 segundos para cruzar el paso en verde. El color rojo, por su parte, tiene una mayor duración: puede llegar hasta los 90 segundos.

Los semáforos de Gran Vía

Los nuevos semáforos que se están instalando en la Gran Vía, de estilo retro, no dejan indiferente a nadie, como se comprueba en una búsqueda en redes sociales. El Ayuntamiento instaló en 2018 el nuevo mobiliario de la calle, que incluye 95 semáforos, 143 bancos, 228 farolas y 89 árboles de la especie peral de flor.

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Una rápida búsqueda en las redes sociales demuestra que la instalación de los nuevos semáforos en Gran Vía está despertando el interés de los ciudadanos, que los fotografían sin cesar y muestran sus opiniones diversas. Son un diseño ideado específicamente para esta calle.

Unos semáforos de diseño que representan de manera mayoritaria el tradicional icono de una figura masculina que también dejaron polémica, porque aunque incluyen imágenes de parejas de mujeres y de hombres, no existe ninguno en el que aparezca la silueta de una en solitario.

Salvo cuatro semáforos con la silueta de dos mujeres y otros cuatro con la de dos hombres, el resto muestran la tradicional simbología de un hombre cruzando o en espera. Estos guardan la línea que se estableció con motivo de la celebración del WorldPride 2017, el Orgullo LGTB Internacional, en Madrid.

Un joven de Madrid genera polémica por su crítica

Pero es su forma la que llama la atención a un joven de TikTok que llega a sugerir que si dice lo que de verdad piensa "acabo en la cárcel". "Entiendo esa rabia contra los semáforos de Madrid", decía otro usuario que comentaba esta publicación que se ha hecho viral en la red social.

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Hay quien apuntaba también que "el punto de los de Gran Vía es que no hagan ruido visual para no interrumpir las visuales a la arquitectura". Otro usuario acumulaba muchos 'corazones' con su comentario, destacando que "los de Gran Vía son un 10". ¿Tú qué opinas de estos semáforos que llevan un tiempo en la céntrica calle madrileña?