Castellón tiene un gran potencial turístico por desarrollar. Un ejemplo es la prácticamente nula oferta hotelera que hay en las zonas de playa de la mitad sur de nuestro territorio. Entre Almassora y Almenara, y es más hasta la población valenciana de Canet, solamente hay en la actualidad un establecimiento hotelero que está ubicado en Burriana. Por tanto, hablamos de que en unos 40 kilómetros de extensión de la costa mediterránea no se cuente con alojamientos donde puedan hospedarse turistas y visitantes.

Esto hace que todas estas poblaciones tengan un turismo escasamente desarrollado, aunque sean municipios que reciban a muchas personas. Moncofa es un ejemplo y con tal de poder crecer, aspira a poder contar con algún hotel de playa en los próximos años, tal y como en COPE reconoce el alcalde, Wenceslao Alós.

"Tener una playa en mejores condiciones nos permitiría llegar a ese ansiado hotel o infraestructura que queremos tener o que queremos volver a tener porque hace dos décadas Costas derribó los dos hostales que teníamos en primera línea".

El gran objetivo

En la actualidad, la prioridad de estos municipios es la defensa del litoral y la construcción de espigones que frenen la regresión que están sufriendo las playas, aunque en el horizonte está que estas obras posibiliten el crecimiento y desarrollo del turismo.

"El primer objetivo es tener los espigones y una vez estén, trabajaremos por tener ese ansiado hotel", afirma Alós.

Si hay hoteles en la mitad norte

La situación es muy diferente en la mitad norte del territorio donde casi todos los municipios tienen hoteles de playa, a excepción de Torreblanca. Entre Castellón de la Plana y Vinaròs si que el turismo de playa está mucho más desarrollado y se cuenta con oferta hotelera.