Como te viene contando COPE, la Comisión Europea insiste en que la viabilidad del regadío de Tierra de Barros pasa por la inclusión del proyecto en el Plan Hidrológico de la Cuenca del Guadiana, “por su impacto sobre la masa de agua”.

Este viernes, el consejero Higuero ha anunciado que se ha solicitado “urgentemente” por carta a la ministra Ribera que incluya el proyecto en dicho plan. Higuero insiste en que el Gobierno de España debe responder lo antes posible “para que podamos empezar las obras cuanto antes”.

El pasado día 14, la Dirección General de Medio Ambiente de la Comisión Europea remitió un escrito a la directora general de Fondos Europeos de la Junta en el que se dice que “los Estados Miembros están obligados a incluir en los planes hidrológicos de cuenca un resumen de las presiones e impactos de la actividad humana en el estado de las masas de agua superficiales…”, añadiendo que “la presión del incremento en las extracciones que emanaría del proyecto debe ser incluido en el plan…”.

Te venimos contando en COPE, según recoge un informe de la Dirección General de Medio Ambiente de la Comisión Europea, de 2 de febrero, que la DIA del regadío fue emitida “antes de la aprobación del III Plan Hidrológico de la Cuenca del Río Guadiana”, y, “contrariamente” a lo que indica la Directiva Marco del Agua, este proyecto “no está incluido en el mismo”.

Lo cierto es que la Junta se ha topado con un muro por la normativa comunitaria. El plan hidrológico depende de la Confederación Hidrográfica del Guadiana, que, a su vez, es un organismo estatal.

Pero esto no acaba aquí. Otro problema a tener en cuenta, y que no es baladí, es que la Dirección General de Medio Ambiente advierte sobre la fecha final de admisibilidad del gasto bajo el programa de desarrollo rural. Estos fondos deben estar gastados antes de finales de 2025. “Estas disposiciones también deberían tenerse en cuenta a la hora de planificar los siguientes pasos en relación con este proyecto del regadío”, añade la Comisión Europea.