En un inesperado golpe para la economía familiar, se avecina un aumento en el precio de un producto básico que frecuentemente ocupa nuestras mesas: la carne de pollo. Actualmente, esta carne se adquiere a un promedio de 3,75 euros por kilo, pero existe la preocupación de que su costo se triplique, incluso superando los 10 euros.

La carne de pollo podría triplicar su precio: ¿por qué?

La razón detrás de esta posible alza de precios se dirige directamente a la nueva Ley de Bienestar Animal de la Unión Europea. Esta legislación impone a los dueños de explotaciones avícolas la reducción de un 30 por ciento del espacio en sus granjas, lo que se traduce en menos animales por granja y la necesidad de construir nuevas instalaciones para mantener el número original de animales. Esta inversión adicional se ha convertido en un desafío insuperable para muchos ganaderos.

PREOCPUACIÓN EN EL SECTOR

Eva María Pozo, una ganadera avícola cuya empresa se encuentra en Puebla de la Reina y cría cerca de 55,000 pollos, ha expresado su descontento y preocupación ante la falta de información sobre la realidad de las condiciones en las granjas avícolas. Contrariamente a la creencia popular, afirma que sus animales disfrutan de óptimas condiciones de vida. En invierno, tienen calefacción, y en verano, aire acondicionado.

Pozo argumenta que las nuevas regulaciones de bienestar animal no solo afectarán el precio de la carne de pollo, sino que también tendrán repercusiones en la carne de cerdo y conejo. La incertidumbre en torno a este aumento de costos ha generado preocupación tanto entre los ganaderos como entre los consumidores, quienes podrían enfrentar un ajuste en sus gastos alimenticios a medida que estos cambios entren en vigor.

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CONSUMIDORES

No hay carne tan básica en la compra semanal como el pollo. Sin embargo, este alimento podría convertirse ahora en un lujo. La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) ya se está reuniendo con las autoridades del Gobierno y las Comunidades Autónomas para presentar un informe del impacto socioeconómico de la nueva medida que baraja la Unión Europea.