El delegado del Gobierno en Extremadura, José Luis Quintana, ha concedido una amplia entrevista a COPE Extremadura, donde se ha referido a numerosos asuntos que le competen directa o indirectamente. Quintana, que dejó la política local tras perder la alcaldía de Don Benito, admite que lo que ve de su pueblo "es un poco triste".

El delegado se ha referido a la polémica Ley de Amnistía, subrayando que "si es buena para España, es buena para Extremadura". Sobre si ha habido cambios de opinión al respecto en el PSOE de Extremadura, Quintana se defiende "usted me está preguntando ahora".

También se le ha preguntado por las últimas polémicas en torno a David Sánchez, hermano del presidente Sánchez, que según el diario Vozpópuli sería residente fiscal en Elvas. Para el delegado del Gobierno, "es ético (...), es legal, es un país de la Unión Europea".

Sobre el cierre de la Central Nuclear de Almaraz dice defender conscuentemente los postulados del Gobierno, aunque subraya que se trata de "una empresa privada, no del Gobierno". Admite no tener la misma posición que el secretario general del PSOE de Extremadura, Miguel Ángel Gallardo y reivindica la apuesta por la gigafactoría de Navalmoral, que dotará de empleo al Campo Arañuelo como alternativa a Almaraz.

El campo también ha sido tema de conversación en la entrevista. Sobre el Regadío de Tierra de Barros, Quintana cree que "tiene futuro" y asegura que no hay ningún impedimento para que saliese adelante mañana mismo. En referencia a las multas que están llegando a los manifestantes del 6-F, Quintana asegura que algunos se comportaron de manera "violenta".

Por último, sobre el albergue de Mérida, Quintana no está en la línea de Rodríguez Osuna. El alcalde de Mérida pidió mejores condiciones para acoger a los migrantes, pero el delegado del Gobierno cree que ya son óptimas y confirma que no está al máximo de su capacidad. Habría unos 700 migrantes, que podrían ser 900 si fuese necesario.