Cada vez cuesta más destacar y las empresas saben que es vital llamar la atención para poder seguir facturando. El comercio local tira muchas veces de ingenio para atraer a la clientela a base de ingenio. En A Coruña encontramos dos ejemplos que tienen algo en común. Un café-bar y una zapatería usan carteles con ingenio e humor como vehículo para llamar la atención y acompañar sus negocios.

El bar de los carteles en los Cantones

"Porque tú también Te mereces una reflexión como Sánchez", "No pierdas el tiempo leyendo el cartel y ven a tomarte un buen café" o "Shakira, deja en paz a Piqué y vente a tomar un café". Con tiza, cada mañana Tony tira de ingenio para escribir un mensaje que atraiga a la gente a su negocio. Casi todos están coronados por una flecha visible desde la céntrica zona de Los Cantones al Callejón de San Blas, donde se sitúa el Café Bar FM .

Es un pequeño local familiar, de menú del día y cocina casera que ha encontrado en este tipo de publicidad una seña de identidad. Tony afirma que “más que nada es por sacar una sonrisa, tomar con un poco de humor el día” y “darle visibilidad a la cafetería, estás escondido en este callejón que parece que te van a dar una puñalada” (ríe).

Todo empezó después de la pandemia “como una especie de broma” a sugerencia de un cliente. De hecho, no recuerda bien el primer cartel pero cree que tenía que ver con “un mensaje de ánimo por el Covid”. Tras esa primera frase, vinieron muchas más. El hostelero intenta que sean siempre frases llamativas o de humor, muchas veces relacionadas con la actualidad. La clientela, que en gran parte son trabajadores de la zona, aporta muchas ideas y sugerencias.

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En general, la gente aplaude las ideas de los carteles, pero en alguna ocasión contada no ha gustado el mensaje. Por una pizarra dedicada a Beyoné “me pusieron una reseña negativa en Google”. En la otra cara de la moneda, recuerda “uno de Messi que había hecho mucha gracia”.

Otra de las curiosidades del local está en el interior y son muchos imanes. Alguno es de países europeos, pero otros, de lugares muy próximos: Melide, Pontedeume, Ponferrada... Ya se ha convertido en una tradición que cuando un cliente anuncia que se ausenta le tiene que llevar un recuerdo "aunque vaya a su aldea en Miño". Cuanto más lejano, mejor "uno que sea hortera".

La zapatería con carteles de Panaderas

Otro ejemplo de carteles hechos a mano para ayudar a las ventas lleva décadas en el centro de A Coruña. En la Casa de las Zapatillas de Panaderas, la acumulación de calzados variados convive con carteles manuscritos, que tienen todo tipo de apuntes. Desde comentarios sobre a quién se aconseja un zapato ortopédico concreto hasta refranes para atraer la visión de la clientela. Detrás de estos carteles está Manuel, quien reconoce que “es una cosa artesanal, que no es habitual verlo en los escaparates”. Aclara que nunca recomienda algo que considera malo y aconseja “siempre sin engañar al cliente”

Este comerciante lo lleva en la sangre. Se jubiló hace unos años y sus hijos tomaron las riendas del negocio, pero él nunca ha dejado de realizar lo que es la seña de identidad de este comercio centenario. Uno de sus carteles más clásicos es el que anuncia unos tenis que son "como los buenos modales, que nunca pasan de moda" .“Aparte de cómodos, son de un precio muy razonable y valen para todos los públicos”, comenta.

No le falta a una sola efemérides. Cada día del Padre, de la Madre o Black Friday sabemos que podemos contar con un cartel actualizado manuscrito por Manuel. A veces los acompaña con recortes de revistas o comentarios sobre la actualidad, y le gusta ver las reacciones de la gente en el escaparate “mirando como un cliente más haciéndome el despistado”. Nunca ha percibido “una crítica destructiva”. Los carteles son un complemento para un negocio que también vende online. De hecho, cuenta que acaban de enviar a Alemania “40 pares de zapatos de baile regional”.

Comunicación de guerrilla

Estos carteles están marcados por tirar de ingenio desde la pequeña empresa. En el mundo de la publicidad, acciones como las de Tony o de Manuel se conocen como 'comunicación de guerrilla'. Lo explica Miguel Conde-Lobato, el responsable de la agencia BAP&Conde: “un poco por el símil militar viene a aludir a la falta de recursos, de medios o al menos a lo desproporcional respecto a otros adversarios”.

Son acciones con pocos recursos pero que quedan para siempre en el recuerdo. Mantiene que hay gente “con don para los eslóganes” como el famoso berciano ‘Prada a Tope’ o una carrera patrocinada por el dueño de un taller de motos y anunciada como ‘Pequecho polo Libro’ por el emblemático dueño de un taller, entre otras campañas y frases inolvidables.

El espíritu de este tipo de acciones se mantiene y se renueva, con ingenio aplaudido siempre por la gente y que se seguirá usando “en estos tiempos nublados de Inteligencia Artificial”, sea con este tipo de acciones o con los actuales memes. Y es que, como dice la agencia de este profesional del marketing, “lo que no sorprende, no vende”.