La educación es un derecho fundamental y el ámbito educativoseenfrenta a grandes desafíos, significativos en diversas comunidades. La comunidad gitana no es una excepción, con solo el 1% de los niños que ha completado la Educación Secundaria Obligatoria (ESO), este dato refleja una realidad preocupante que merece atención y acción urgente.

Desde la Asociación de Promoción Gitana de La Rioja se reconoce este desafío y ven en el bajo porcentaje una realidad demoledora. En una comunidad gitana de 9.000 personas en la región, la plena integración de sus miembros con respeto y apoyo a su cultura es una meta primordial.

COMUNIDAD GITANA

Gran parte del problema radica en la falta de referentes educativos dentro de la comunidad gitana. Por eso, la historia de Abigaíl Peralta es una inspiración y un ejemplo.

Abigaíl, una de las pocas gitanas con educación universitaria, ha superado numerosas barreras para alcanzar sus logros académicos. Su labor no se limita a su trabajo; también es un modelo a seguir para otros niños gitanos que se enfrentan obstáculos similares.

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La implicación de la historia gitana en el currículo escolar es una propuesta fundamental desde la Asociación Gitana. Esto creen que podría ayudar a involucrar a los niños, fomentando un sentido de pertenencia y valoración cultural.

Abigaíl, graduada en Filología Hispánica y con un máster en Educación, ahora ejerce como profesora, demostrando que la educación superior no es inalcanzable para los jóvenes de la comunidad gitana.

Su éxito sirve de ejemplo no solo para los niños gitanos, sino también para las familias que ven en ella un modelo a seguir. Sin embargo, queda mucho por hacer. Esta joven de 24 años cree que es hora de abordar este desafío con determinación y compromiso para garantizar un futuro más brillante para todos los niños gitanos en nuestro país.