Iñigo Urkullu Renteria, de 59 años y natural de Alonsotegi, en Bizkaia, se convertirá con toda probabilidad en lehendakari por tercera vez, tras dos legislatura al frente del Gobierno Vasco que recuperó tras tres años y medio de Gobierno del socialista Patxi López. Su victoria en la noche de este domingo abre la posibilidad a que este diplomado en magisterio revalide su pacto con el PSE.

Además, Urkullu está especializado en filología vasca; trabajó como profesor 2 años, en la ikastola Asti Leku de Portugalete y el colegio Félix Serrano de Bilbao, antes de dar el salto a la política, aunque sigue siendo maestro funcionario de carrera excedencia en el Colegio Landako de Durango, localidad en la que tiene la residencia familiar.

Aficionado al Athletic y al txistu

También le gusta hacer deporte , disfrutar de la naturaleza y leer. Se considera un aficionado a la música, y toca el txistu, la popular flauta vasca, y el tambor.

Es seguidor del Athletic de Bilbao y está casado precisamente con Lucía Arieta-Araunabeña, la hija del mítico jugador rojiblanco Arieta I.

Considerado un político moderado, sus allegados lo definen como un hombre serio, metódico, religioso y familiar, y dicen que es una persona accesible, discreta y afable en las distancias cortas al que le gusta especialmente disfrutar de Kerman, Malen y Carlos, sus tres hijos.

Es conocida también es la buena relación que mantuvo con el expresidente del Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero, con el que llegó a varios acuerdos, lo que causó malestar en el socialismo vasco.

“Hombre de partido” al servicio de la sociedad vasca

De cara a estas elecciones, Iñigo Urkullu ha dejado claro que él es un “hombre de partido”", que está a su “servicio” y también al de la sociedad vasca.

También asegura que se siente con fuerzas para afrontar un tercer mandato, porque asegura que Euskadi le “Ilusiona”. Una ilusión que podrá poner de manifiesto en su nuevo Gobierno autonómico en el que todo apunta a que pacte con el PSE para reeditar su pacto de Gobierno.