El Área de Movilidad y Sostenibilidad del Ayuntamiento de Bilbao no se conforma con el alto número de desplazamientos peatonales actuales, el 65% de todos los desplazamientos internos diarios de la ciudad. Por eso, para intensificar ese buen dato, la Teniente de Alcalde y Concejala del Área, Nora Abete, ha presentado hoy “Metrominuto”, el mapa que mide las distancias y los tiempos que se tarda caminando entre los principales puntos de la ciudad en el marco del programa de actividades de la Semana Europea de la Movilidad (SEM 2023),

La iniciativa, aprobada en pleno, ve ahora la luz con el objetivo de continuar impulsando la movilidad a pie en la ciudad, para que los viandantes se conviertan en los máximos protagonistas de la movilidad urbana y del espacio público.

Bilbao no parte de cero en este planteamiento, ya que desde el Área de Salud y Consumo llevan años distribuyendo planos de la ciudad con 15 recorridos que ayudan a descubrir muchos de los rincones desconocidos de la ciudad, que recogen datos como la dificultad, la duración e incluso la inclinación del recorrido.

Metrominuto está pensado para reforzar el protagonismo de Bilbao en lo que respecta al alto número de desplazamientos peatonales, así como en transporte público en los viajes internos. “De los 850.000 desplazamientos internos que se hacen en Bilbao a diario, 550.000 los hacemos a pie” ha señalado Nora Abete, que ha añadió que el Área de Movilidad y Sostenibilidad lo considera “un valor a preservar e incluso a incrementar, por lo que continúa desarrollando políticas que hagan que estas cifras sigan creciendo”.

Concretamente, en los últimos doce meses más de 14,6 millones de personas han utilizado los 64 ascensores municipales. Una red de ascensores, ha recordado Nora Abete, “que junto a las rampas o escaleras mecánicas existentes en la ciudad, utilizadas por 3,4 millones de personas en los últimos 12 meses, las ampliaciones de aceras, la creación de ejes continuos y seguros de peatonalizaciones, el ajuste de los tiempos de los semáforos, campañas como la mencionada Red de Caminantes o los Caminos Escolares, hacen de la movilidad peatonal una de los ejes estratégicos para conseguir una ciudad más sostenible y saludable.”

En 2020, Bilbao fue galardonada con el premio “Ciudad Amiga”, que anualmente concede la Red de Ciudades que Caminan, por sus esfuerzos en favor de la Caminalidad, algo que ha destacado su coordinadora técnica, Ana Montalbán quien ha señalado “la tendencia a la inercia urbana en los desplazamientos en coche y los prejuicios de la ciudadanía, como retos que dificultan el cambio de mentalidad”.

Por su parte Javier Mielgo, ha asegurado que para Alboan “Metrominuto es un recurso para ofrecer una propuesta de participación ciudadana vinculada a la campaña Somos Amazonia. Una manera de poder contribuir a la reducción de consumo energético y acercar a la ciudadanía de Bilbao la causa de la defensa de la Amazonía y de los pueblos indígenas. Queremos recuperar el caminar como el medio de transporte más ecológico y saludable. Además de esta manera nos vincularnos simbólicamente con los pueblos originarios; pueblos que caminan con un estilo de vida armonioso con la naturaleza y la vida”.

Metrominuto, mapa sinóptico

El Metrominuto es un mapa sinóptico que mide distancias y tiempos caminando entre unos cuantos puntos de cada ciudad. El mapa representa las principales centralidades de cada ciudad (servicios, plazas, parques, centros de barrio…) y la distancia entre ellas, expresada en metros y en minutos. Maneja los códigos visuales de los mapas de metro, como un guiño a uno de los modos de transporte significativos de las grandes urbes, si bien aplicados a las ciudades.

Su finalidad es sensibilizar a favor de la cultura del caminar, poniendo en evidencia la proximidad entre lugares reconocibles de la ciudad. Al tratarse de distancias cortas y tiempos breves, nos predispone mejor a caminar hasta nuestro destino, eligiendo el medio pedestre para los desplazamientos.

Con este proyecto se pretende además resaltar la importancia de ir construyendo ciudades compactas, densas y diversificadas, donde las necesidades de la vida cotidiana pueden resolverse en trayectos de diez o quince minutos a pie, lo que nos permite hacer realidad la famosa teoría de la “ciudad del cuarto de hora”, que sería la distancia a la que tenemos los principales destinos o paradas de transporte público que necesitamos para nuestra vida cotidiana.